La gripe ha superado el umbral epidémico en la segunda semana del año y se sitúa en 97,54 casos por cada 100.000 habitantes, con una tendencia ascendente, según la información elaborada por la Red Centinela Sanitaria de la Comunidad recogida por Europa Press.
En concreto, la pasada semana la tasa se situó en nivel de epidemia de intensidad baja, aunque con tendencia ascendente, con la mayoría de los virus detectados de tipo A (H1N1) y una situación similar a la del resto de España y de Europa.
Así, la tasa estimada para Castilla y León es de 97,54 casos, mientras la estandarizada (ajustada por la población española del padrón municipal de habitantes) se sitúa en los 101,64 casos entre el 6 y el 12 de enero.
Es la primera vez que la gripe supera el umbral epidémico en esta temporada (situado en los 50 casos), precisamente en la segunda semana del año, al igual que ocurriera en 2019.
Según el informe de la Red Centinela, la tasa de incidencia acumulada por edad supera los 1.200 casos en menores de hasta cuatro años y se acerca a los 600 entre los niños de cinco a 14 años, mientras que en el resto de tramos de edad no supera los 300, salvo en el de 45 a 64 años, en el que lo hace ligeramente.
CONSEJOS
La Consejería de Sanidad, a través del Portal de Salud, ofrece algunas recomendaciones ante la gripe. Así, por un lado, para evitar su transmisión y contagio a otras personas se aconseja a las personas que se encuentren enfermas que se protejan al toser (cubrir la boca y la nariz con un pañuelo al toser o estornudar o cubrirse con la parte superior del brazo y no con las manos); lavarse las manos después de toser o estornudar y no acudir a lugares cerrados (trabajo, colegio, guardería o lugares públicos) para evitar el contagio.
Además, en caso de padecer gripe, se recomienda descansar, beber abundantes líquidos, evitar el consumo de tabaco o alcohol y tomar medicación que mejore los síntomas de la gripe (medicamentos para bajar la fiebre).
Asimismo, se recuerda que los antibióticos no mejoran los síntomas ni aceleran la curación, ya que no son efectivos frente a enfermedades producidas por virus, y que no se debe dar aspirina a niños ni adolescentes.
En esta línea, Sanidad ha apuntado que actualmente existen fármacos que actúan frente al virus (fármacos antivirales) pero su uso es "muy limitado", puesto que si se dan en las primeras 48 horas tras el inicio de los síntomas pueden reducir la duración de la enfermedad, sin embargo deben ser recetados por un médico ya que pueden tener efectos adversos importantes.