Aunque nadie en el cuerpo técnico del Real Valladolid quisiera decirlo, era una final. Tras nueve partidos sin conocer la victoria, desde el 3 de noviembre, el conjunto de Sergio González buscaba, en la isla, volver a la senda del triunfo ante un rival directo al que aventajaba, antes del pitido inicial de Medié Jiménez, en cuatro puntos.

Los caprichos de este calendario asimétrico ponían al conjunto de Vicente Moreno, el último al que el Pucela venció en Liga, allá por el mes de noviembre, de nuevo delante. Eso sí, en un Son Moix que respiraba también la esencia de un choque en el que ambas escuadras se jugaban no solo tres puntos sino insuflar una dosis de moral tremenda.

Y el Pucela salió mejor. Ya en el 6 del encuentro Enes Ünal avisaba a Reina tras un remate de cabeza después de un envío desde la izquierda de Raúl García Carnero. El del Getafe está firmando buenas actuaciones desde su llegada y parece que se ha adaptado bien a lo que le pide Sergio.

Alcaraz y Míchel se imponían en la medular y el Pucela carburaba. El conjunto vallisoletano se gustaba con un Toni muy activo entre líneas y desactivaba así al pulmón y cerebro del conjunto mallorquinista, el incombustible Salva Sevilla.

Sin embargo, el partido iba a sufrir un zarandeo en el 27 del mismo. Una gran jugada entre Lago Junior y Lumor iba a ser rematada por Dani Rodríguez que iba a enviar la bola al fondo de las mallas del marco defendido por Masip. La diana no subió definitivamente al marcador porque el esférico salió completamente por línea de fondo en el momento en el que el lateral bermellón dio la asistencia al 14 local.

Esto encendió a la afición local y al cuerpo técnico. Dani Pendín, ayudante de Vicente Moreno, iba a ser expulsado antes de que el Pucela volviera a intentarlo en el 31 del encuentro tras una buena jugada entre Toni y Ünal.

Sergi Guardiola. Imagen: LFP

Tras este periodo de electricidad en el tramo central del primer acto, el choque volvió a bajar en intensidad. Los dos equipos volvieron a ser conscientes de la importancia de no perder más que de ganar y el choque se fue al tiempo de asueto con el resultado gafas de 0-0.

Tras esto, el Pucela salió en busca de los tres puntos. Avisó primero Guardiola y después Óscar Plano tras una gran jugada de estrategia pero fue a la tercera cuando el conjunto vallisoletano puso el primero en el luminoso después de la lesión de Raillo, un estandarte para los locales.

Un jugadón de Sergi Guardiola por la derecha iba a ser la antesala perfecta para un cabezazo tremendo de Enes Ünal que alojaba el esférico en el fondo de la portería de Reina, en el 56, para poner el 0-1.

Imagen LFP

Fue un jarro de agua fría para el Mallorca y los hombres de Sergio supieron manejar la situación con ese poso que se le pide. Míchel y Alcaraz pedían la bola y el cuadro visitante corría tras el esférico. Sin embargo, y como es normal, los locales se vinieron arriba y buscaron el empate primero con un disparo lejano de Valjent y luego con otro de Kubo en el 72 y 74 del partido.

El nipón Kubo era protagonista y los baleares buscaban el empate pero el Pucela se mostraba seguro y volvía a dar sensación de equipo, unido, con esas coberturas y ese esfuerzo coral que acabó por dar los tres puntos a los de Sergio.

Mallorca es ya la isla de las sensaciones porque el Pucela las recuperó, con tres puntos dorados para ponerse con 25 en la tabla clasificatoria, siete más que su rival de esta noche.

Ficha Técnica:

0-RCD. Mallorca: M. Reina; Joan Sastre (Pozo, min.70), Valjent, Raíllo (Xisco Campos, min.48), Lumor; Salva Sevilla, Baba, Dani Rodríguez (Kubo, min59), Lago Junior; Cucho Hernández, Budimir.

1-Real Valladolid: Masip; Moyano, Salisu, Kiko Olivas, Raúl García Carnero; Alcaraz, Míchel, Óscar Plano (Wald, min.87), Toni (Hervías, min.72), Enes Ünal (San Emeterio, min.90), Sergi Guadiola.

Goles: 0-1, Enes Ünal, min.56.

Árbitro: Medié Jiménez. Amonestó a Budimir, Dani Rodríguez, Reina, Cucho Hernández, por el Mallorca y a Toni Villa por el Real Valladolid.

Incidencias: Estadio de Son Moix. 13.891 espectadores.