Excrementos, basura y un mensaje: así ha dejado Toño Sanchís la casa que ya es de Belén Esteban
Toño Sanchís y Belén Esteban se ha enfrentado esta mañana a un día decisivo en su batalla judicial. Este 5 de marzo de 2020 era la fecha designada por la justicia para proceder al deshaucio de la casa del representante. Una situación a la que han llegado después de un arduo enfrentamiento en los Tribunales que terminó condenando a Toño a pagar 600.000 euros a Belén Esteban.
Una gran cantidad de dinero que desembocó en la subasta y venta del chalet del mánager en Villanueva del Pardillo. Belén Esteban se convirtió en la nueva propietaria de esta mansión después de participar en una subasta pública que tuvo mucha repercusión.
Pasados los meses, la colaboradora de Sálvame anunciaba públicamente que este 5 de marzo se llevaría a cabo el desahucio y que sabía que Toño agotaría el plazo para salir de su hogar: "Va a esperar a abandonarla hasta el último momento para dar pena, estoy segura".
Dicho y hecho, Toño abandonaba esta misma mañana su hogar sin querer hacer ningún tipo de declaración a todos los medios que esperaban a las puertas de su domicilio.
Una hora después, la Guardia Civil y la Policía se personaba en el chalet para proceder al desahucio. Al no estar ya ni Toño ni su familia, todo el proceso ha sido mucho más sencillo. La jueza ha llegado para certificar el estado de la casa y proceder al cambio de la cerradura.
Una situación de lo más delicada en la que hemos podido comprobar cómo ha dejado Toño el que fue su domicilio. Desde fuera del chalet hemos podido ver cómo el exrepresentante de Belén Esteban ha dejado un mensaje pintado con rotulador en la entrada de la casa. Un 'ganaremos' que demuestra la actitud tan combativa que ha tenido Sanchís durante este largo proceso judicial.
Además, el jardín exterior de la casa está lleno de excrementos de perro y el garaje tiene restos de basuras con latas de refrescos y colillas.
Un auténtico caos en el que los casquillos de las lámparas, tanto interiores como exteriores, han sido arrancados de cuajo; por lo que, todo el cableado ha quedado a la vista.
Unas imágenes escalofriantes que se convierten en una nueva venganza del que fue la mano derecha de la 'princesa del pueblo'.