El Papa Francisco ha convocado este miércoles 25 de marzo a las 12,00 horas a todos los cristianos del mundo a rezar "a la vez" la oración del Padre Nuestro por "el fin de la pandemia" del coronavirus, y coincidiendo con la Solemnidad de la Anunciación del Señor.
El Pontífice invita a "todos los Jefes de las Iglesias y a los líderes de todas las comunidades cristianas, junto con todos los cristianos de las distintas confesiones, a invocar al Altísimo y Dios Omnipotente" y "a rezar el Padre Nuestro al mediodía". "Recémoslo muchas veces, pero todos a la vez, a mediodía", propuso el Pontífice el pasado domingo 22 de marzo al término del rezo del Ángelus.
Precisamente, este martes la Red Mundial de Oración del Papa ha lanzado una edición especial de 'El Vídeo del Papa', además de la Intención de Oración para marzo dedicada a los católicos chinos, en la que el Santo Padre pide oración "por los enfermos" y "por las personas que sufren" a causa de la pandemia mundial por el coronavirus.
En el vídeo, el Papa invoca a la Madre de Dios para que libre "de todo peligro" y muestra su agradecimiento "a todos los cristianos, a todos los hombres y mujeres de buena voluntad que rezan por este momento, todos unidos, cualquiera que sea la tradición religiosa a la que pertenezcan".
El Papa Francisco quiere, de esta forma, que esta sea "una semana especial de oración por el fin de la pandemia". Por ello, el Vaticano está difundiendo tanto el vídeo como las convocatorias del rezo del Padre Nuestro y de la bendición 'urbi et orbi' extraordinaria que el Pontífice impartirá el próximo viernes 27 de marzo bajo el hashtag #PrayForTheWorld. "A la pandemia del virus respondamos con la universalidad de la oración", ha señalado Francisco.
Por otro lado, la Conferencia Episcopal de Portugal ha convocado también este miércoles a las 19,30 horas a un rezo del Rosario desde Fátima, en recuerdo a todas las víctimas de la pandemia del coronavirus. La Conferencia Episcopal Española (CEE) anunció el pasado domingo que se unirá a este acto, que estará presidido por el obispo de Fátima, el cardenal António dos Santos Marto, y que también será un homenaje a los familiares de las víctimas del virus, al personal sanitario y a todos los trabajadores fundamentales en el funcionamiento de los servicios básicos.