Más de cien personas han muerto y unas 4.000 han resultado heridas debido a las potentes explosiones registradas el martes por la tarde en la zona portuaria de Beirut, según ha informado este miércoles el secretario general de la Cruz Roja Libanesa, George Kettneh, a DPA.
Además, el jefe de la organización humanitaria en el país ha advertido de que el número de víctimas mortales podría seguir aumentando. Las autoridades libanesas han indicado que los servicios de emergencias aún buscan a unos cien desaparecidos entre los escombros.
Los vídeos que circulan en redes sociales muestran una explosión y una gran columna de humo, previas a una segunda deflagración de mayor potencia que ha causado enormes daños materiales en los alrededores, llegando a escucharse en Tiro y Sidón.
El primer ministro, Hasán Diab, ha decretado este miércoles como jornada de luto nacional en homenaje a las víctimas y ha pedido ayuda internacional ante lo que ha descrito como "una catástrofe".