Diana Rigg ha muerto este jueves a los 82 años, según ha adelantado la BBC. La actriz británica no ha podido superar un cáncer diagnosticado el pasado mes de marzo, y ha fallecido mientras dormía acompañada de sus familiares.
La artista saltó a la fama en los años 60 con la serie de televisión 'Los vengadores' y que, en la actualidad, era mundialmente conocida por su papel en Juego de Tronos, dando vida a Olenna Tyrell. Con una larga carrera en la escena teatral, también fue protagonista en la película de la saga James Bond 007 al servicio de su Majestad, donde su personaje se casaba con el famoso agente.
Su propia hija, Rachael Stirling emitía el siguiente comunicado para anunciar su pérdida: "Mi querida mamá ha fallecido tranquilamente en su cama a primera hora de esta mañana, rodeada de su familia. Ha muerto de un cáncer diagnosticado en marzo, y ha pasado sus últimos meses reflexionando con alegría sobre su extraordinaria vida, llena de amor, risas y un profundo orgullo por su profesión. La echaré tanto de menos que no tengo palabras".