Ana Sánchez, procuradora socialista por Zamora, vicepresidenta 2ª de las Cortes de Castilla y León y secretaria de Organización del PSOECyL, es una de las voces más reconocidas y, también, duras y agresivas desde la oposición contra los sucesivos gobiernos del PP en la Junta de Castilla y León. Quizás la mujer con mayor poder dentro del socialismo castellano y leonés y mano derecha del secretario regional y portavoz del Grupo Socialista en las Cortes, Luis Tudanca. Además, "cristiana y madre de una niña maravillosa", como le gusta reconocer. No obstante, durante la entrevista portaba una mascarilla negra con la imagen de una 'Dolorosa' de Zamora, o quizás fuera La Soledad, o más bien la Virgen de la Esperanza, pero todo dentro de la Semana Santa zamorana de la que es fiel seguidora y participante. Dicen de ella que es una mujer "pegada a la tierra, a las tradiciones de su Zamora del alma" donde vive. Por algo ella se define como "zamorana por los cuatro costados, una mujer joven y de convicciones. Me dedico a la política porque creo firmemente en ella para cambiar las cosas. Reacciono ante las injusticias, disfruto mucho de la compañía de mis amigos...". Con esta política de raza hablamos sobre el antes, el ahora y el después de Castilla y León. 

¿Es “ infantil” pedir una comisión de investigación sobre las residencias en Castilla y León?

Es absolutamente obligado pedir una comisión de investigación sobre residencias en Castilla y León cuando uno tiene enfrente a auténticos irresponsables, que no han sido capaces, no sólo de no ofrecer soluciones, sino que además se están creando problemas en la segunda ola de la pandemia. Todo el mundo conoce el comportamiento absolutamente leal del Partido Socialista de Castilla y León en su integridad. Desde el primero hasta el último, capitaneados y mandados por Luis Tudanca, hemos sido leales en los peores momentos. Nuestros alcaldes levantaban la voz de alarma en aquellos sitios donde había un problema. A lo largo de la primera ola llamábamos directamente a la Junta de Castilla y León para que lo solventara. Hemos sido absolutamente responsables firmando y arrimando el hombro en todo momento en un Pacto de Reconstrucción, que la Junta de Castilla y León se ha apresurado en incumplir flagrantemente el informe que presentaba la misma Junta. Es una auténtica tomadura de pelo. A lo largo de todo el verano no han hecho una sola inspección en las residencias de la Comunidad Autónoma. Inmersos en la segunda ola, no sólo no han hecho un análisis de lo que pasó en la primera, sino que además siguen blindan a aquellos a los que protegen, que no son precisamente nuestros mayores. Estamos recogiendo el modelo sembrado por el Partido Popular durante más de treinta años de gobierno, un modelo privatizado y privatizador que no tienen ningún interés en cambiar. Y desde luego, sí, una lección hemos aprendido, que en este ámbito hay que apostar claramente por lo público. Por tanto, queremos saber la verdad. Hoy es un hecho objetivo que están ocultando la verdad y queremos saberla, porque en esas residencias hay seres humanos, hay seres humanos con vidas, con trayectorias, con familias, y les debemos una explicación.

Bajo la óptica del Partido Socialista, ¿qué puede haber acontecido en esas residencias?

Desde luego que no se han hecho las cosas bien. A todas luces, y lo hemos visto todos los castellanos y los leoneses, se tomaron decisiones equivocadas. Las consejerías de Familia y de Sanidad no se ponen de acuerdo ni tan siquiera en los datos. Se les requiere en imperativo que faciliten los datos, que es derecho de los usuarios y sus familias y se escudan en excusas peregrinas para no hacerlo. Por tanto, es absolutamente necesario saber qué pasó exactamente. Desde luego, algo no han hecho no sólo bien, sino rematadamente mal, para que se estén blindando, para no facilitar los datos, saber qué pasó y evitar que vuelva a suceder. Mire, yo soy de Zamora, como todo el mundo sabe. Hace dos semanas la Fiscalía Provincial le exige a la consejera de Familia que facilite los datos porque desde el mes de julio no les pasan ni uno solo. Tres meses sin que se pase ni un solo dato, con residencias contagiadas íntegramente, sin saber si están solo los residentes, si son residentes o trabajadores, si se han hecho inspecciones y solo se han hecho visitas. No se ha puesto una sola sanción.

No es admisible, hablamos de vidas humanas. Por tanto, se lo pide Fiscalía, se lo pide el Grupo Parlamentario Socialista y la sociedad castellano y leonesa en su conjunto. Es inadmisible lo que está haciendo el Partido Popular, que mal está. Pero el indecente planteamiento de Ciudadanos, desde luego, yo creo que tendrá consecuencias directas en la opinión pública.

Sobre esa cuestión le iba a preguntar, la postura de Ciudadanos de antes y ahora, a su entender.

La postura de Ciudadanos en Castilla y León es siempre la misma. Ciudadanos no tiene palabra, que probablemente es lo peor que se pueda tener en política. Ciudadanos de Castilla y León vino a regenerar la política en en esta tierra y se ha convertido en el complemento necesario del Partido Popular. Tapan con mayor ahínco la corrupción y también la nefasta gestión del Partido Popular con respecto a las residencias que es nefasta. Ciudadanos ha decidido ser su cómplice y, por tanto, asumirán también las consecuencias de esa nefasta gestión.



Existen en las Cortes de Castilla y León más comisiones de investigación abiertas. La ‘eólica’, también la Comisión de Investigación de ‘La Perla Negra’ y la Comisión de Investigación sobre el Plan de Medios. ¿A todo esto que tiene que decir Ana Sánchez?

Tengo que decir que tenemos el peor presidente de la historia de Castilla y León en el momento más delicado de nuestra historia reciente. Tenemos un presidente que no querían los castellanos y leoneses, que se empeñó en gobernar a costa de todo y de todos y que siempre estaba allí, a lo largo de los peores momentos de todos los casos de corrupción que asolan al Partido Popular de Castilla y León. En todos ellos estaba Alfonso Fernández Mañueco, si no en el despacho, sí en el despacho de al lado. Pero no sólo en los casos de corrupción que usted citaba, donde se desvalijaron más de 1.100 millones de euros de las arcas públicas que no se invirtieron en sanidad, que no se invirtieron en educación, que no se invirtieron haciendo residencias públicas, que no se invirtieron en la dependencia, que se fueron directamente a los bolsillos de los altos cargos del Partido Popular, de la cúpula de Economía, en este caso Alfonso Fernández Mañueco como consejero de Presidencia. Cuando todo esto sucedía, no se enteraba de nada. Cuando el señor Carriedo paralizaba las licencias de los informes medioambientales determinantes para que se pudieran adjudicar los parques eólicos, el señor Mañueco, que era consejero de Presidencia y al que informaban los delegados territoriales, no se enteraba de nada. Por cierto, tiene a Carriedo en su Gobierno que resulta determinante para que todo aquel procedimiento pudiese salir adelante. Y así se pudieran embolsar millones de euros los dirigentes del Partido Popular de los castellanos y leoneses, y ahora lo tiene al frente de la ‘caja pública’. Este es el señor que va a hacer los presupuestos en el momento más delicado de la historia de nuestra Comunidad Autónoma.

Por tanto, tenemos a un presidente de la Junta perteneciente a un Partido Popular condenado por corrupción, y  que los castellanos y leoneses no eligieron, al que no quieren. Pero no sólo eso, no queda ahí. La cosa es que podía haber hecho propósito de enmienda. Pero no. Tiene de asesor al señor Cosidó, que, como todo el mundo sabe, es la persona de confianza del imputado ministro del Interior en la trama del 'caso Kitchen'. Pero es que como todo el mundo sabe, Alfonso Fernández Mañueco, y ya está contrastado, además de estar siendo investigado por la Audiencia Provincial de Salamanca, ya es un hecho objetivo que mintió y que hizo trampas para ganar sus primarias. Tenemos un presidente y un fraude de ley. De verdad, Castilla y León merece mucho más. Supongo que ante estos comportamientos, los castellanos y leoneses tenían muy claro por qué querían a Luis Tudanca. Porque representa la antítesis de lo que representa Mañueco. Luis Tudanca es un hombre apegado a la tierra, honesto, decente, que siempre arrima el hombro donde un castellano y leonés lo necesita. Lamentablemente, la falta de palabra de Ciudadanos y en virtud del ‘pacto de la rapiña’, nos coloca a Alfonso Fernández Mañueco al frente del Gobierno y del mismo Partido Popular de los últimos 33 años.

Como vimos en el último Pleno de las Cortes, al presidente de la Junta le incomoda hablar sobre la corrupción y dirige su mirada para otros temas.

Mira para otro lado, pero ya no convence a nadie. Quiero decir, todo el mundo sabe, porque además lo dice ya una sentencia firme, que el Partido Popular, condenado por la Gürtel de Castilla y León, no solo formaba parte del mapa de la corrupción del Partido Popular, sino que era epicentro. Aquí se ha condenado a tres años y siete meses, ni más ni menos que al ex vicepresidente de la Junta de Castilla y León del Partido Popular señor Merino. Y ya estaba Mañueco por allí. Por tanto, yo cuando oigo a Francisco Vázquez hacer esos retos de verdad, me pregunto si conocen la vergüenza. Cómo pueden mirar a la cara de los castellanos y los leoneses y decirles que busquemos un solo sitio donde se relacione al Partido Popular de Castilla y León en los 1.800 folios de la sentencia de la Gürtel, cuando ya en el folio 654, si no me equivoco, comienza por decir que el Partido Popular se constituye como organización para delinquir. Lo dice una sentencia firme y en el conjunto de esa sentencia se condena a todo un ex vicepresidente de la Junta de Castilla y León a tres años y siete meses por adjudicaciones y embolsarse comisiones con asuntos que tienen que ver con Castilla y León. De verdad. Yo les pediría un poquito de mesura y, desde luego, les invitaría a pedirle perdón a los castellanos y leoneses.

Durante la entrevista portaba una mascarilla negra con la imagen de una 'Dolorosa' de Zamora, o quizás fuera La Soledad, o más bien la Virgen de la Esperanza, pero todo dentro de la Semana Santa zamorana

El vicepresidente Francisco Igea llega a Castilla y León a regenerar la vida política según sus palabras durante la campaña electoral y antes en su proceso de primarias frente a Silvia Clemente.

¡Je, je, je! ¡Ja, ja! Vamos a ver, señor vicepresidente, yo creo que ya es una caricatura de sí mismo. Le da igual decir una cosa y la contraria con apabullante frivolidad. Lo peor que le puede pasar a un político o a un responsable público es no tener credibilidad y en virtud de no tener palabra, uno la pierde, como toda esta gente. Esta reacción espontánea que me ha dado a mí cuando me has preguntado por Igea, si usted sale a la calle y escoge a diez personas y les hace la misma pregunta, les da a nueve. El problema de todo eso es que es letal para los intereses de los castellanos y leoneses, para la defensa de ni más ni menos que la lucha contra la despoblación y la ordenación territorial.

Por tanto, el señor Igea es un lastre para esta Comunidad Autónoma, pero lo sabe toda Castilla y León. El problema es que cada día que sigue al frente de la Vicepresidencia nos hace perder muchas oportunidades a los castellanos y leoneses.

Seamos sinceros. ¿Qué pasa con el Plan de Medios que Ciudadanos tenía para hacer justicia con todos los medios de comunicación de Castilla y León? Resulta que nos encontramos con la misma situación que se venía padeciendo de la época de Herrera y también de Lucas.



Lo de Ciudadanos es la fe de los conversos. Siempre son mucho más ultras que cualquier otro. Por tanto, como le decía, creo que Ciudadanos es más papista que el Papa y se está comportando de la misma forma o peor, como usted bien sabe. Desde luego, nosotros hemos velado siempre por la transparencia en lo que tiene que ver con todo eso, así lo están haciendo nuestras compañeras en la misma comisión y seguiremos haciéndolo. Pero querían gobernar a costa de todo y de todos y desde luego están demostrando un año después,  que no sólo continúan con las mismas viejas y malas prácticas que se han usado en los últimos 30 años en Castilla y León, sino que además están ahondando en ellas con peores formas. Si me permite.

Respecto al tema de la televisión regional, ya sé que su compañera Virginia Barcones es quien lleva este asunto, pero el otro día, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, el señor Igea, recalcaba una vez y otra “hemos aprobado estos 6,4 millones de euros porque en su día se hizo el acuerdo con el visto bueno de todos los grupos políticos”.

Insisto en lo que decía cuando me preguntaba por qué se autodenomina vicepresidente de la Junta de Castilla y León. No, es que yo no le creo ni media palabra, es que es muy difícil creer a Francisco Igea, porque no le cree nadie. En esta Comunidad Autónoma hay un modelo de televisión, efectivamente, que todos hemos defendido. Pero en los últimos años lo que esté haciendo él en este momento, como mínimo me resulta inquietante, porque no sé exactamente qué hace, no dice una verdad.

¿Qué opina de la situación política actual?

Me preocupa. Me preocupa profundamente ver que algunos responsables políticos no están siendo capaces de ver la situación que viven nuestros vecinos. Me preocupa que quienes se empecinan tanto en gobernar no ejerzan sus competencias para lo que realmente nos necesitan nuestros vecinos. Me preocupa ver que en el último pleno el Partido Popular viene aquí a pedir que se defienda la Constitución Española, que no está en cuestión y desde luego a nadie le va a dar lecciones, y menos al Partido Socialista, que es el partido más constitucionalista de este país, y menos aquellos que no sólo la manosean, sino que la incumplen flagrantemente. Ahí están las sentencias. Y me preocupa que traslademos a nuestros vecinos esa sensación de falta de certeza y de seguridad e inseguridad, porque en tiempos difíciles necesitan ver que hay alguien al mando, que hay alguien llevando el timón, independientemente de quien sea. Por eso nosotros, durante toda la pandemia, nos pusimos al lado de la Junta de Castilla y León. Y créame, era muy complicado sentarse a la mesa de Alfonso Fernández Mañueco y de Francisco Igea. Fue muy difícil para Luis Tudanca, pero Tudanca es un líder que está a la altura de esta tierra y de su gente y antepuso los intereses de los castellanos y los leoneses al dolor de barriga que nos da tener que sentarnos con ellos. Pero lo hicimos pensando en ellos, en darles certezas.

Cuando hablamos del tema de las residencias, yo creo que cuando hablan con ese desparpajo de no facilitar datos, de llevarlo a la bronca política, en lugar de que colaboremos entre todos, creo que no se paran a pensar en la incertidumbre de las familias, en su angustia. Ya no sólo de nuestros mayores que están en las residencias, ya no solo de los trabajadores, sino de las propias familias. ¿Quién no tiene un familiar en un centro residencial en Castilla y  León? Nos han convertido en la Comunidad Autónoma, no sólo más despoblada, sino más envejecida de toda España. De verdad no cuidaron a nuestros jóvenes. Tampoco van a cuidar a nuestros mayores. Me preocupa mucho que se instale en Castilla y León un sentimiento de abandono por parte de las instituciones. Y lo peor es que creo que no les faltan motivos porque nos sentimos ciertamente abandonados y sin capitán del barco.

Vamos camino de media legislatura.

Sí. ¡Qué rápido pasa! Y qué de cosas pasan en un año en política. En los últimos años hubo una vorágine muy loca. Nosotros ganamos las elecciones después de 33 años. Tenemos un proyecto conocido y reconocido por los castellanos y los leoneses. Un líder indiscutible dentro del partido. Pero lo que es aún más importante, fuera de él, cada día más reconocido por la gente, sentimos el afecto y el cariño de los castellanos y leoneses a diario. Porque una cosa no hemos dejado de hacer es de recorrer el territorio entero, porque es grande Castilla y León. Y vemos cómo va evolucionando la legislatura y el 'gobierno de la rapiña'. Creo que los castellanos y leoneses están esperando a Luis Tudanca. Para eso trabajamos. El proyecto que presentábamos fue reconocido en las urnas de Castilla y León por la soberanía popular. Es el que querían, es sobre el que trabajamos y desde luego cuentan y van a seguir contando con todos nosotros para en tiempos difíciles, y esperamos que en tiempos mejores, sepan que tienen una puerta a la que llamar.

Óscar Puente ya sabe lo que dijo, como que quería una oposición más dura.

Es que el Partido Socialista de Castilla y León tenemos más de 10.000 militantes y le aseguro que todos tienen una opinión dentro de un partido donde se expresan las opiniones. Considero, quiero y aprecio al alcalde de Valladolid. Creo que es el mejor alcalde de Valladolid posible. Su opinión es bienvenida. Tomamos nota como del resto de los más de 10.000 militantes. Pero fíjese, no creo que sea sospechosa de no hacer una oposición dura. Dice el Partido Popular que somos muy duros, ¿no? Por tanto, vamos a estar a lo que quiere la gente, que se resuelvan sus problemas y lo demás son cuestiones nuestras con las que a veces nos entretenemos los políticos.

Gracias.

Muchas gracias a ti.

Durante la entrevista en su despacho de las Cortes de Castilla y León