El vicepresidente, portavoz y consejero de Transparencia, Ordenación del Territorio y Acción Exterior, Francisco Igea, reivindicó hoy el espacio de la centralidad y la moderación frente a los que desde el Gobierno central cuestionan a su juicio los pilares del sistema democrático y constitucional en un momento “dramático”.
Igea, que inauguró el acto 'Liberales frente a iliberales: Retos y amenazas para la España Constitucional', organizado por el club de opinión ‘La España Que Reúne’, identificó la existencia de una crisis política derivada de un Gobierno y una forma de hacer política que censura al denominado “régimen” de 1978, que dotó al país de una Constitución de “consenso”.
En ese sentido, el vicepresidente insistió en que está en cuestión el modelo constitucional de España en un momento de crisis sanitaria, social y económica, fruto de la pandemia del COVID-19. Todo ello, además, se une un clima de polarización política en el que se deslegitima la posición del adversario, lo que para Igea puede llevar al enfrentamiento entre ciudadanos.
De la misma forma, el vicepresidente de la Junta censuró la “tiranía” impuesta por quien desde el Gobierno considera que tiene una mayoría suficiente para considerar que todo lo que hace está bien y es legítimo. Así, citó el control del poder judicial o la fiscalía, una “herencia” del bipartidismo, y defendió el modelo de la socialdemocracia, que dota al Estado de un sistema sanitario y educativo público.
Por ello, Francisco Igea defendió como la “utopía más necesaria” que haya gente que se dedique a reunir y no a separarlos, una “noble tradición hispana” a juicio del vicepresidente, que abrió el foro desde su despacho de la Junta a través de la plataforma Zoom.
Los participantes en este debate fueron: la secretaria general de la Fundación Hay Derecho y abogado del Estado, Elisa de la Nuez; el catedrático Emérito de Derecho Constitucional Francesc de Carreras y el catedrático de Derecho Administrativo de la Universidad de León, Francisco Sosa Wagner. El coloquio estuvo moderado por la diputada en la Asamblea de Madrid, Marta Marbán.