El secretario general de Podemos en Castilla y León, Pablo Fernández, mostró hoy su temor a que el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco,; el vicepresidente, Franciso Igea, y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, quieran crear un “remedo del trío calavera” y "seguir la misma senda", tras el apoyo mostrado ayer a los dirigentes de la Comunidad por la política madrileña, tras “imponer unilateralmente” el toque de queda a las 20.00 horas “sin contar con absolutamente nadie”.
Pablo Fernández expuso su “preocupación” por las decisiones adoptadas por el Ejecutivo de la Comunidad que suponen, a su juicio, una “huida hacia adelante” para tapar su “nefasta gestión”. A su entender, Mañueco e Igea siguen utilizando el modus operandi de crear cortinas de humo para “ocultar su incompetencia” y denunció que la situación actual con una incidencia de la pandemia “totalmente desbocada” es fruto de que los responsables de la Junta quisieron “salvar la Navidad”.
El dirigente de la formación morada criticó, en este sentido, que la Junta adoptó en Navidad, las medidas frente a la COVID “más laxas de toda España” y sentenció que “de aquellos polvos vienen estos lodos”. “No hicieron nada para frenar la pandemia y estamos como estamos”, lamentó.
Pablo Fernández cargó además contra el Gobierno regional porque con esa incidencia se plantea un equipo de trabajo para intentar salvar la Semana Santa, buscando alternativas a las procesiones, dijo, tras generar una “enorme incertidumbre con el toque de queda a las 20.00 horas”.
Fernández resumió que en lo que compete a Mañueco e Igea “nada de nada, porque están de brazos cruzados mirando lo problemas como las vacas al tren”. Al respecto, exigió la puesta en marcha de tres medidas para frenar la situación, con un refuerzo de la sanidad pública, tanto en atención especializada como en primera; cribados masivos y acelerar el ritmo de vacunación y al menos 250 millones en ayudas directas para los sectores más afectados por las medidas restrictivas de la Junta, como la hostelería.
Pablo Fernández criticó duramente que la Junta no refuerza ni amplía plantillas, y recorte unilateralmente las condiciones de estos trabajadores sanitarios que llevan un año “dejándose la piel para cuidarnos”. Asimismo, lamentó que no hay fecha para cribados masivos en localidades como Segovia, con una “incidencia totalmente desbocada”.
Además, cargó con Mañueco por afirmar que las ayudas no llegan a los hosteleros porque no las piden. “Es intolerable, vergonzoso y deleznable”, dijo, para afirmar que el presidente se dedica a “tomar el pelo a la gente y en este caso a un sector que lo esta pasando francamente mal”, concluyó.