Un estudio multicéntrico, en el que han participado 36 hospitales de España y Andorra, demuestra que el uso temprano de corticoesteroides en pacientes críticos con COVID-19 se asocia con una menor mortalidad que cuando se administran de forma tardía. Además, se observa que el momento óptimo para su administración es dentro de las primeras 48 horas tras el ingreso en la UCI.
El estudio está coordinado por Carlos Ferrando, jefe de la Unidad de Cuidados Intensivos Quirúrgicos (UCIQ) del Hospital Clínic de Barcelona, investigador del grupo Mecanismos fisiopatológicos de las enfermedades respiratorias y del CIBER de Enfermedades Respiratorias (CIBERES), y el primer autor del trabajo es Pablo Monedero, especialista del Servicio de Anestesia y Cuidados Intensivos de la Clínica Universidad de Navarra.
En la COVID-19, como en las enfermedades infecciosas en general, la respuesta inmune antiviral es crucial para eliminar el virus que la provoca. El problema surge cuando se produce una respuesta inapropiada del sistema que causa una hiperinflamación sistémica que puede provocar complicaciones como el síndrome de distrés respiratorio o un fallo multiorgánico. "El tratamiento temprano de esta hiperinflamación es clave para reducir la mortalidad en pacientes con COVID-19", explica Carlos Ferrando.
Los corticoides se utilizan para tratar distintos síndromes hiperinflamatorios. Aunque la Organización Mundial de la Salud (OMS) desaconsejó su uso al inicio de la pandemia, actualizó posteriormente su recomendación de uso en pacientes graves y críticos en base a distintos estudios.
Para este estudio, que ha sido publicado en 'Critical Care', los investigadores examinaron si el uso temprano de corticoides disminuía la mortalidad y mejoraba el pronóstico de los pacientes. Se incluyeron los pacientes críticos con COVID-19 ingresados en Unidades de Cuidados Intensivos de 36 hospitales de España y Andorra entre el 12 de marzo y el 29 de junio de 2020. En total se analizaron los datos de 882 pacientes.
Los resultados demuestran que la mortalidad global en las UCI fue del 34,9%, pero para el grupo tratado de forma temprana con corticoidesteroides fue del 30,3%, mientras que para los tratados de forma tardía fue del 40,3%. "Esto demuestra que el uso temprano de corticoides en pacientes críticos con COVID-19 se asociaba con una menor mortalidad en la UCI, en comparación con un tratamiento tardío o la ausencia de este tratamiento. También vimos que la estancia media en la UCI era menor, que la afectación de otros órganos disminuía y que los pacientes requerían menos días de ventilación asistida", señala Carlos Ferrando.
MEJOR RESULTADO CON DOSIS MÁS ELEVADAS
Los investigadores vieron que el momento de inicio del tratamiento era relevante a nivel clínico. Tratar a los pacientes dentro de las 48 horas tras la admisión en la UCI reducía la mortalidad y la estancia en las unidades de críticos. Por otro lado, también observaron que dosis más elevadas de corticoidesteroides a las actualmente recomendadas para pacientes COVID-19 grave producían mejores resultados clínicos.
Idealmente los corticoides deben utilizarse en las fases iniciales de la hiperinflamación. Su uso en ausencia de este estado, es decir, en pacientes que no tienen COVID-19 grave, podría no aportar ningún beneficio e incluso ser perjudicial. También el uso tardío de los corticoides cuando existe un daño orgánico avanzado puede ser inefectivo o perjudicial, tal y como se ha descrito en el síndrome de distrés respiratorio.
Los doctoresCarlos Ferrando y Jesús Villar están co-liderarando un ensayo clínico que cuenta con el Centro de Investigación Biomédica en Red (CIBER) del Instituto de Salud Carlos III como promotor del mismo, para comparar en pacientes con Síndrome de Distrés Respiratorio Agudo de origen infeccioso que requieren de ventilación asistida las dosis actualmente recomendadas para tratar a los pacientes críticos COVID-19, con dosis más elevadas previamente utilizadas en sus estudios.