Ana Sánchez apela a las conciencias de los 81 procuradores de las Cortes para desalojar a la “derecha corrupta” de Castilla y León
La procuradora socialista Ana Sánchez, secretaria de Organización del PSOE y vicepresidenta de la Mesa de las Cortes ha sido la encargada de presentar la moción de censura presentada por su partido contra el gobierno de coalición PP-C´s, que hoy se debate en las Cortes de Castilla y León con el objetivo de lograr la presidencia de la Junta para Luis Tudanca.
Durante su intervención, Ana Sánchez, ataviada con una mascarilla con la imagen impresa de la Virgen de la Esperanza de Zamora, ha denunciado que la coalición ha defendido la necesidad de la moción de censura ante la degradación de las instituciones, y ha denunciado que la coalición ha estado gobernando “contra el pueblo, se comunica desde la soberbia y la ciudadanía se siente abandonada cuando no agredida”. “Ustedes ya están censurados”, ha asegurado, “la moción de censura a la derecha corrupta de Castilla y León ya se la pusieron los castellanos y leoneses en 2019”, recordando que el PSOE fue la fuerza política más votada en las últimas elecciones autonómicas. “Ya les ganamos en las urnas, provocando una derrota estrepitosa, y no será la última”.
Además, ha subrayado que el PP y Ciudadanos han perdido la mayoría en la cámara, tras la marcha de la procuradora de C’s María Montero, que ahora es diputada no adscrita.
Por ello, ha apelado a las conciencias de los 81 procuradores de la cámara, “a sus conciencias, a su compromiso ético y moral” para decidir entre “perpetuar” la corrupción o devolverle a la Comunidad la “decencia”, así como mantener a Alfonso Fernández Mañueco en la Junta, o devolverle al pueblo al líder que en su opinión eligieron, el socialista Luis Tudanca.
Ana Sánchez fue la encargada de presentar la moción de censura en el pleno extraordinario de este lunes ante la Cámara, “sede y cuna” del parlamentarismo, lo que recordó supone un “enorme peso”, por lo que llamó a los procuradores a hacer “de nuevo historia”. Destacó que Tudanca es heredero de los que defendieron principios y valores.
“No se rinde jamás”, dijo en la defensa del interés general, para que Castilla y León sea “digna”, “próspera”, de “esperanza” y de “oportunidades”. Por ello, insistió de nuevo a los procuradores a “escuchar” el “clamor” de las calles. “Me dirijo a los 81 procuradores de la cámara, apelo a sus conciencias, al compromiso ético y moral”, dijo, para que hagan un ejercicio de “honestidad”.
Así, formuló una serie de preguntas sobre la eficacia y la responsabilidad del Gobierno en la gestión de la pandemia, sobre la rendición de cuentas o las explicaciones sobre la “sobremortalidad” en las residencias de mayores. También planteó si han sabido aprovechar la “fuerza inmensa” del Pacto por la Recuperación, que todas las fuerzas les facilitaron con “amplia generosidad”. “Soberbia e indolencia”, dijo recibieron.
La socialista aseguró que Tudanca conoce cada “centímetro” de esta “apasionante” tierra, porque es solo “uno más”, “austero”, “sencillo” y “honesto”. Añadió que no ha estado “solo” nunca porque es el líder indiscutible del “enorme” batallón de los socialistas, desde la “centralidad” del tablero, y la “sensatez”. "Es el líder social indiscutible de Castilla y de León”.
Insistió en que es el primer en llegar y el último en marcharse, y añadió que él siempre aplica la máxima de “donde vayas que siempre puedas volver”. Además para Tudanca, destacó, “la palabra vale” y añadió que detesta a los que ambicionan el poder por el poder, “a costa de todo y de todos”. Recordó que resultaba “repugnante” sentarse a la mesa de Mañueco e Igea tras el reparto de “alcaldías y carguillos”, pero destacó que él es “pura coherencia” y “pura lealtad” a la Comunidad.
También recordó los pactos con los empleados públicos, a su juicio “muy por encima” de la Junta, puesto que recordó se les ha pagado su esfuerzo con un “decretazo”, así como el diálogo social. “Algunos no dejamos en la cuenta a nadie, ustedes a todos, a todos”, replicó. Además, planteó si es admisible que un gobierno llame a la rebelión o a incumplir las leyes en plena pandemia. “Es mínimamente admisible”, preguntó al tiempo que planteó si Mañueco e Igea pueden liderar la salida de la crisis.
“Nuestros vecinos saben que cuentan con un gobierno para el que ellos no cuenta”, dijo, apeló a sus conciencias, porque se trata de lo de “todos”, “no de lo suyo”, sino de defender -dijo- a los que dieron la palabra y depositaron en ellos sus “anhelos” y proyectos de vida a través del voto. “No soportan más traiciones y tienen derecho a tener esperanza de que se cumpla lo prometido: cambio y regeneración”, sentenció.
“Solo al pueblo nos debemos", recordó Ana Sánchez al inicio de su intervención, en la que avanzó no replicaría al vicepresidente Francisco Igea, porque añadió que "su palabra no vale nada". La socialista argumentó la moción por la “degradación absoluta” de la calidad democrática, la ruptura de consensos, la quiebra de la confianza de la ciudadanía y la pérdida de la mayoría en la Cámara.
“Han estado gobernando contra el pueblo, comunicando desde la soberbia”, dijo y sin cercanía. “Ustedes han perdido la confianza, también la mayoría de la cámara”, dijo también la confianza en la calle y la mayoría en el parlamento. “Ustedes ya están censurados”, sentenció.
La moción, continuó Ana Sánchez, es un mecanismo de exigencia de responsabilidad, no una forma de desestabilizar el sistema, lo que a su juicio lo provoca el “abandono” de las personas e instituciones por parte de un ejecutivo que solo busca la estabilidad para conservar sus “poltronas” y no el “buen gobierno”. Tampoco, añadió, es electoralista, porque recordó ganaron las elecciones y auguró que no será la última vez que lo hagan, porque indicó que la moción de censura a la “derecha corrupta” ya se la pusieron en mayo de 2019 los ciudadanos.