La moción de censura presentada por el PSOE contra el gobierno de PP-C´s ha fracasado, al no conseguir la mayoría de los apoyos de los procuradores de la Cámara. Además de los votos de los parlamentarios socialistas, un total de 35, la candidatura de Luis Tudanca sólo ha conseguido los votos de los dos procuradores de Unidas Podemos, muy lejos de los 41 necesarios para lograr la mayoría absoluta de una cámara con 81 escaños. UPL y Por Ávila de han abstenido, así como la procuradora no adscrita María Montero, que abandonó el pasado viernes el grupo de Ciudadanos. Mientras, la procuradora de VOX, Fátima Pinacho, ha votado en contra de la moción planteada por el PSOE.
Así, el popular Alfonso Fernández Mañueco seguirá siendo presidente de la Junta de Castilla y León con el apoyo de C’s, formación con la que formó coalición tras las elecciones del pasado mes de mayo de 2019.
Sin embargo, aunque la coalición de Partido Popular y Ciudadanos ha mantenido el tipo, lo cierto es que la moción de censura se salda con peaje: la pérdida de la mayoría absoluta de la cámara, que le obligará de aquí a final de legislatura a negociar toda iniciativa legislativa.
Tras un fin de semana largo y de mucha incertidumbre, finalmente los once procuradores de Ciudadanos no se han desmarcado de la disciplina de partido impuesta tanto por Inés Arrimadas como por Francisco Igea, vicepresidente de la Junta. Un temor que atenazaba a los populares tras la deriva de lo acaecido en Murcia y que sembró la duda y la desconfianza dentro del propio grupo parlamentario de Ciudadanos.
Tras lo sucedido hoy, nada parece indicar que se produzca una remodelación del gobierno regional, una vez confirmada la fortaleza de la coalición que, no obstante, gobernará con mayor dificultad tras perder la mayoría absoluta.