“El Gobierno debería ser responsable, tener un plan b y un plan c. Si no hay modificaciones, no habrá toque de queda, se podrá viajar entre comunidades y las restricciones de reuniones también serán más complicadas para las comunidades autónomas”. Lo dice el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, quien reprocha al jefe del Ejecutivo nacional, Pedro Sánchez, que, desde agosto, no quiera oír hablar de la pandemia, “salvo para algunas buenas noticias”.
“A veces no se toman decisiones y dejan la responsabilidad a las comunidades autónomas. Cuando estamos hablando de una pandemia mundial, y el Gobierno de España tiene que asumir esa responsabilidad. Desde el 31 de julio no se ha vuelto a reunir la Conferencia de Presidentes para hablar de la pandemia”, encuentro que considera necesario, según afirma en una entrevista que publica hoy El Mundo en su edición nacional y local.
Lo ve preciso para, entre otras cuestiones, analizar el estado de alarma y decidir sobre si debe prorrogarse, algo que debe depender, a su juicio, de la situación epidemiológica y del grado de población vacunada.
En este sentido, el presidente de la Junta reitera la necesidad de una nueva legislación sanitaria, después de que la actual se haya visto superada por la pandemia. “Pablo Casado ha tendido la mano para trabajar en una herramienta ordinaria, sin necesidad de un estado excepcional. Necesitamos una legislación que sea más fácil de gestionar por las comunidades”.
“Es el presidente del Gobierno el que tiene que mover ficha. Está pensando más en las elecciones de la Comunidad de Madrid, y lo que tiene que hacer es pensar en el interés de toda España. Debe iniciar un proceso de diálogo con los partidos y las comunidades autónomas”.
En este sentido, añade que la pandemia ha puesto a prueba el Estado autonómico, y que se debe aprender y mejorar el diálogo y los instrumentos de coordinación del Gobierno con las comunidades. “En España tenemos que funcionar como otros estados federales”, sentencia.
Tranquilidad con la vacunación
Por lo que se refiere al proceso de vacunación, Fernández Mañueco defiende que los ciudadanos pueden estar tranquilos, tras el episodio de la paralización de la vacuna de AstraZeneca, pero considera que cada país está tomando sus decisiones y que la Agencia Europea de Medicamentos tiene que dar mensajes “más contundentes y con más claridad”.
No obstante, respecto al hecho de que Castilla y León fuera la única Comunidad que suspendiera la vacunación con esta marca, añade que se hizo por un “principio de precaución”, hasta que las autoridades sanitarias se pronunciaran sobre su uso.
En este momento, a Fernández Mañueco “no” le parecen fiables las previsiones de tener al 70 por ciento de la población vacunada después del verano. Cree que el proceso va a ir un poco más lento. “Pedro Sánchez sale para dar buenas noticias, pero cuando no se cumplen esas buenas noticias, se esconde. Es una decepción como presidente”.
Por otro lado, el presidente de la Junta justifica el hecho de que Castilla y León haya sido una de las comunidades más golpeadas por la pandemia en múltiples las causas. Por un lado, su gran superficie, y estar “abrazados” por ocho comunidades autónomas, y muy cerca de Portugal. “El ser tan grande y estar en el medio de España hace que las influencias lleguen por todos lados. Las olas van y vienen, suben y bajan, el virus ha venido por los lugares más abiertos”.
También, por la edad. Debido a que la mayoría de los fallecidos tienen más de 70 años, y las provincias de Castilla y León están entre las quince con mayor población de esta edad. En este punto, reconoce que hay que “mejorar el sistema residencial”.
Mejores datos que Madrid
Respecto a la gestión de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ejemplo para el PP en la gestión, Fernández Mañueco se alegra por que su gobierno sea “el paradigma del crecimiento”, pero defiende que los datos de Castilla y León son “mejores”. “Hemos buscado el equilibrio entre salud y economía. Hemos sufrido toda España, pero en Castilla y León hemos resistido mejor. Nuestro PIB ha caído un 6,9 por ciento, menos que el 7,9 por ciento de Madrid y el 9,1 por ciento de toda España, la tasa de paro es del 11,61 por ciento, casi dos puntos inferior a la de la Comunidad de Madrid y hemos cerrado 2020 con un superávit del 0,04 del PIB”. “Teníamos claro que la seguridad sanitaria era lo mejor para la reactivación económica”, añade, para reconocer un “gran sufrimiento en el sector de la hostelería”.
“Todos tenemos que ayudar”
Reconoce que tras un año de pandemia, “una desgracia mundial que ha vivido nuestra generación, como nuestros padres vivieron la Guerra Civil”, ha habido tensión, “pero Pablo Casado ha estado colaborando en la primera ola y ha propuesto varios pactos de Estado”. “Todos tenemos que ayudar a rebajar la tensión, mi partido y yo mismo el primero. Por eso cuando Sánchez dio la orden de poner la moción de censura me pareció una irresponsabilidad y un error”.
En todo caso, precisa que quedó patente que “Perdió Sánchez y ganó Castilla y León”. Dejó a Sánchez derrotado, y a los delegados de Sánchez, totalmente desprestigiados. Lo que ha hecho es proyectar a este Gobierno del PP y Ciudadanos hacia el futuro”, un socio que considera “leal”.
“Hace días vino a verme Inés Arrimadas y le trasladé el compromiso de no convocar elecciones en los dos próximos años y ella me trasladó el suyo de no apoyar ninguna moción. Confiamos los unos en los otros”.
Sobre la esfera nacional y a los casos de transfuguismo, quiere que gane Isabel Díaz Ayuso las elecciones, pero su objetivo en Castilla y León va a ser negociar con los votantes. “Muchas veces fichar a una persona no tiene por qué traer los votos”. Además, preguntado sobre la estrategia de los partidos de convertir las autonómicas en una especie de generales, indice en que estas “son las elecciones de Madrid y de los madrileños”. “Convertir las elecciones en Madrid en unas generales me parece un error. España es mucho más que Madrid. Es mucho más diversa que la Comunidad de Madrid. He visto con mucho disgusto los últimos acontecimientos violentos”.
En todo caso, el jefe del Ejecutivo autonómico, que prefiere hablar de su experiencia, con la decisión de no convocar elecciones en estas circunstancias, considera que Díaz Ayuso, doblará el resultado de las últimas elecciones según los sondeos. “Ayuso tiene una personalidad propia, pero el problema para el PP sería el contrario, que no gobernara. Un partido se construye a base de victorias electorales. Una victoria de Ayuso ayudaría a Pablo Casado. Él mismo lo ha dicho. Ayuso conviene a Madrid y conviene a España”.
Congresos provinciales
Sobre los congresos provinciales, afirma que el PP de Castilla y León es muy fuerte. “Tiene muchos militantes y muchos gobiernos municipales. De cara a los congresos provinciales, creo que lo importante es que las personas elegidas sean las adecuadas. No tenemos que hablar de nosotros mismos, tenemos que ser capaces de buscar a los mejores, a los que presentan una buena hoja de resultados electorales”. “Hemos celebrado los congresos de Ávila y Valladolid con acuerdo. Pero tampoco pasaría nada porque hubiera dos candidaturas en algún sitio”.
En el caso de Salamanca, su provincia, añade que “sería un error que se interpretara como un conflicto entre la dirección nacional y la dirección regional. Los problemas de Salamanca se deben resolver entre los salmantinos. Desde 1991, no se ha perdido ningún proceso electoral en Salamanca, y la unidad ha sido la principal fortaleza del PP. Quien vaya contra la unidad del partido en Salamanca, va contra el proyecto colectivo del partido y contra lo que yo represento”.