Miriam Badiola / ICAL
“Quien paga manda”. Con esta expresión se refirió este lunes el secretario general de Podemos Castilla y León, Pablo Fernández, en relación a la encuesta de intención de voto publicada en el día de ayer y en la que se recoge que, en el caso de una hipotéticas elecciones autonómicas, Podemos obtendría un 4,6 por ciento de los votos.
Para Fernández, este tipo de encuestas “reflejan quién ha podido pagarla y de dónde viene ese dinero”, de manera que “los resultados así lo indican”. No obstante, el líder autonómico de la formación morada reconoció que las encuestas “no suelen acertar” sobre los resultados de Podemos, a quien “se ha vaticinado su muerte de manera constante”, por lo que pidió que “sean un poco más rigurosas”, porque “Podemos e Izquierda Unida concurrirán unidos a las elecciones”.
“No hay ningún tipo de duda de que en 2023 quien se presentará a las elecciones será Unidas Podemos, tanto a los comicios autonómicos como a todos los Ayuntamientos de Castilla y León”, puso de relieve Pablo Fernández, para quien la encuesta “ni siquiera tiene en cuenta ese particular”.