La pandemia ha aumentado los casos de paranoia, especialmente donde el uso de mascarillas ha sido obligatorio, según ha puesto de manifiesto un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Yale (Estados Unidos) y que ha sido publicado en la revista 'Nature Behavior'.
Además, los expertos han comprobado que el aumento de los sentimientos paranoicos también se han asociado con una mayor aceptación de las teorías de la conspiración. "Nuestra psicología se ve enormemente afectada por el estado del mundo que nos rodea. Desde el punto de vista de las políticas, está claro que si un gobierno establece reglas, es importante que se cumplan y se apoye a las personas para que las cumplan. De lo contrario, pueden sentirse traicionados y actuar de forma errática", han dicho los investigadores.
En este sentido, han recordado que hay muchos precedentes históricos de un aumento en las teorías de la conspiración durante tiempos de trauma, desde la creencia predominante de que los brotes de peste bubónica medievales fueron causados por judíos que envenenaban agua de pozo hasta el movimiento 'La Verdad del 11-S' que sostuvo que los ataques terroristas de 2001 fueron orquestados por el gobierno de los Estados Unidos. "En tiempos de trauma y grandes cambios, lamentablemente, tenemos la tendencia a culpar a otro grupo", han zanjado.