El vicepresidente y consejero de Transparencia, Ordenación del Territorio y Acción Exterior, Francisco Igea, afirmó hoy que la pandemia ha evidenciado que cuando se habla de trasparencia no es un ejercicio de retórica y añadió que la Junta se encuentra inmersa en un proceso sin precedentes de implantación de una cultura de la transparencia y la regeneración democrática.
En su comparecencia para informar del grado de cumplimiento de los objetivos de su departamento para la legislatura, Igea, que arrancó dando las gracias a los miembros de la Comisión por su trabajo y con un recuerdo por las muertes que ha causado la pandemia, defendió que su departamento cumple con la agenda regeneradora y hace honor a su nombre, la transparencia.
Igea destacó que la visualización de la situación epidemiológica de Castilla y León motivada por el coronavirus es un modelo de referencia, visitada en este tiempo por 4,05 millones de usuarios nuevos, más de 23 millones de sesiones y cerca de 44 millones de páginas vistas, lo que ha situado a Castilla y León a la cabeza de las comunidades autónomas en lo que a transparencia e información sobre el covid se refiere.
El consejero detalló que en octubre de 2020 resultó premiado por la Fundación Novagob como el proyecto con el mayor impacto social en respuesta a la COVID-19; en enero de 2021 por la Fundación Fundos a la Innovación Social Pública y en febrero de 2021 por Castilla y León Economía a la Mejor Institución Digital.
“Gracias a nuestra acción actualmente la Junta de Castilla y León se encuentra inmersa en un proceso sin precedentes de implantación de una cultura de la transparencia y la regeneración democrática”, sostuvo, para añadir que no se han apartado de su hoja de ruta aunque se han tenido que adaptar a la situación de crisis sanitaria.
Así, defendió que la pandemia “ha sido lamentablemente la ocasión para comprobar que cuando hablamos de transparencia no estamos haciendo un ejercicio de retórica parlamentaria, no hablamos de política de salón. No, hablamos de iniciativas concretas, de recursos concretos, de acciones concretas que son útiles para todos”.
“Desde que existe esta Consejería, la Administración de Castilla y León es sin duda más transparente”, sentenció, ya que sostuvo que este principio contribuye a reestablecer la confianza de los ciudadanos en las instituciones, fomentar su participación y su corresponsabilidad en las políticas públicas, además de su repercusión práctica en el día a día de las personas.