El Consejo Económico y Social (CES) de Castilla y León ha reclamado una “reforma sustancial” del proyecto de decreto de la Consejería de Transparencia, Ordenación del Territorio y Acción Exterior sobre la creación del Consejo de Dinamización Demográfica ante “la ambigüedad del texto”, “la incoherencia entre objetivos y articulado” y la “discrecionalidad en la participación" que en algunos aspecto advierte de que es "contraria a derecho”.  

Este 'revés' del CES figura en el informe previo solicitado por el departamento de Francisco Igea a esta institución antes de aprobar la norma que creará este órgano, que sustituye al actual Consejo de Políticas Demográficas. En el apartado de conclusiones y recomendaciones, indica que el texto recoge una participación "más restrictiva y un funcionamiento menos eficaz” y señala que la futura Ley de Dinamización Demográfica debería recoger su constitución y sus funciones.  

A juicio del Consejo el decreto contiene “contradicciones” en relación al carácter del Consejo, señalando unas veces a este órgano como consultivo y otras como de participación y de deliberación. Asimismo, advierte de que las funciones relativas a emigración e inmigración no se recogen y sin embargo se mantienen operativos los dos grupos de trabajo establecidos al respecto.  

También indica que no mejora la regulación actual sobre las funciones, competencias y composición del nuevo órgano, ni tampoco logra, en su opinión, la finalidad de generar una mayor participación social. Al respecto, pide modificar el texto “procurando una regulación menos discrecional de la participación de las diferentes organizaciones y entidades”.

“Adecuada concreción"



En este informe consultado, el CES indica que el borrador del decreto no realiza una “adecuada concreción” de las organizaciones que tendrán representación. Además, recuerda a la Consejería de Igea que en el caso de sindicatos y patronal debe respetar lo recogido en la Ley para la creación del Consejo del Diálogo Social y Regulación de la Participación Institucional (2008) que indica que será de aplicación "a todos los órganos de participación de la Administración General e Institucional de la Comunidad”.

Esta apreciación del CES responde a la propuesta de Transparencia de que sindicatos y empresarios tengan un único representante en el nuevo Consejo. En su opinión, debería ajustarse a la legislación y mantener la actual composición: un miembro por cada organización sindical más representativas y dos para las empresariales. También, ve “más conveniente” que todas las organizaciones profesionales agrarias puedan designar representantes y no que todas ellas tenga una única voz.

De la misma forma, plantea que una única persona sea elegida por la organización del trabajo autónomo mayoritaria en Castilla y León en lugar de que ésta sea designada por las entidades participantes en la Mesa del Autónomo de Castilla y León. Además, propone incluir a las entidades sin ánimo de lucro con más experiencia y cobertura en la gestión de proyectos y programas en materia de atención a inmigrantes, promoción de la participación y activación de voluntariado.

“Los movimientos migratorios han constituido en la última década un respiro para nuestra comunidad, posibilitando en algunos años el incremento del número de residentes. Por ello, esta institución considera que Castilla y León debe enfocar sus políticas de dinamización geográfica hacia los migrantes por lo que consideramos de gran utilidad el desarrollo de actuaciones dirigidas a personas inmigrantes o aquellas que quisieran venir al territorio castellano y leonés para brindarles el apoyo necesario y facilitar su integración en nuestra sociedad, teniendo en cuenta que Castilla y León siempre ha sido una tierra solidaria que ahora debe seguir impulsando su carácter de tierra de acogida”, expone el CES.

Eficacia

Por otra parte, el CES habla de “retroceso” en la eficacia de este nuevo órgano en comparación con el Consejo existente porque argumenta no se prevé la creación de órganos intermedios, como una comisión permanente que asegure la operatividad y coordinación. Además en sus observaciones advierte de que se prevé el funcionamiento transitorio de “únicamente dos de los cuatro grupos de trabajo ya constituidos”, lo que para el Consejo podría generar incertidumbre al eliminar, al menos temporalmente, aspectos como la juventud, el empleo y la dinamización económica y empresarial, que entiende son “importantes” para el impulso demográfico.  

Finalmente, considera necesario que se fomente una “eficaz coordinación” entre el Grupo de Trabajo Interconsejerías de Dinamización Demográfica y este nuevo Consejo.