El nombramiento de los magistrados para formar parte del Tribunal Constitucional se ha convertido en el nuevo campo de batalla para los diferentes grupos políticos. Cada uno se agarra a los propuestos por ellos y rechazan los del adversario. Así, la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, se ha mostrado “muy satisfecha” por la elección de los nombres propuestos por su partido y sus socios, el PSOE.
En su opinión, “es una buena noticia” que estén incluidos juristas como Ramón Sáez, “porque son de enorme prestigio” y “personas que han luchado contra la impunidad franquista”, ha asegurado en Valladolid durante este viernes ha firmado un convenio con el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco.
En cuanto al nombramiento de Enrique Arnaldo, propuesto por el Partido Popular, y que no ha sido bien recibido por la formación morada, ha asegurado que “quien debe responder ante la ciudadanía es quien propone a los candidatos”.
La ministra de Derechos Sociales y de Agenda 2030 ha recordado que la mayor parte de los diputados de Unidos Podemos ha apoyado el acuerdo con el PSOE y el PP, pese a que han sido varios los parlamentarios que se han saltado la disciplina. Otros lo hicieron “tragándose un sapo” como recordó ayer el secretario regional en Castilla y León, Pablo Fernández.
Por último, ha señalado que el objetivo ahora es poner el "foco” en renovar el Consejo General del Poder Judicial, “aún pendiente” para garantizar el cumplimiento de la Constitución.