Traspinedo daba este mediodía su último adiós a Esther López, de 35 años de edad, en un funeral multitudinario en el que se han dado cita tanto familiares y amigos como la mayor parte de los vecinos de este pueblo vallisoletano, conmocionado por la muerte en extrañas circunstancias de la joven, a la que se espera arroje luz tanto la autopsia como las investigaciones de la Guardia Civil.
La misa exequial ha tenido lugar en la iglesia parroquial de San Martín de Tours de este municipio, que se ha sumido en un profundo silencio como muestra de respeto a la familia afectada. En horas previas, el alcalde de esta localidad había pedido "el máximo respeto para la familia y al pueblo en estos momentos de dolor y duelo”.
Acto seguido a la misa funeral se ha producido el traslado al cementerio municipal de esta misma localidad, donde ha recibido sepultura.
La familia, arropada por el munciipio en estos dolorosos momentos
El cuerpo de Esther López fue hallado el pasado sábado en una cuneta de una de las carreteras de acceso a Traspinedo, tras 24 días desaparecida. Se le había perdido el rastro el pasado 12 de enero. La investigación para esclarecer las circunstancias de su muerte prosigue y no se descarta ninguna hipótesis.