Tras casi dos horas de reunión en las Cortes de Castilla y León, el Partido Popular y Vox han logrado un acercamiento en algunas cuestiones programáticas de cara a la formación del nuevo Gobierno autonómico, según ha señalado el candidato de Vox Juan García-Gallardo. "Nos vamos con la satisfacción de que el PP ha visto que todo lo que pedimos a nivel de programa es razonable, es de sentido común y eso no va a ser un impedimento para que podamos formar un acuerdo", ha dicho García-Gallardo.
Mañueco se abre a un pacto programático con Vox
Según el candidato de Vox, Mañueco se ha abierto a llegar a un acuerdo programático con su partido, sobre la base del programa del PP pero incorporando algunas de las propuestas de Vox. Pero García-Gallardo ha informado de que el PP sigue insistiendo en gobernar en solitario, con el apoyo externo de su partido en base a un acuerdo programático, y que Vox se cierra en rotundo a votar a favor de la investidura si no se les da entrada en el Ejecutivo, como la formación lleva anticipando varias semanas.
"El mandato de los ciudadanos es cristalino y lo que estamos esperando es que el PP interiorice la idea de que tienen 31 procuradores y la mayoría absoluta está en 41". Y asegura que si esto no sucede no van a conceder su apoyo a Mañueco. "Si Vox no entra en el Gobierno vamos a votar en contra de cualquier pacto de investidura", ha afirmado con rotundidad, algo que, si las negociaciones continúan por este camino, conduciría inevitablemente a una repetición de elecciones en la región.
García-Gallardo asegura que no pide "ni más ni menos" que otros partidos
García-Gallardo ha aseverado que en esta primera toma de contacto la distancia entre ambas formaciones ha sido "aún muy grande". "El trato que quiere dar el PP a Vox es muy distinto al que se ha dado a otros partidos en otras ocasiones similares", ha añadido el candidato de la formación, en referencia a que Mañueco si que dio entrada a Ciudadanos en el Ejecutivo tras el pacto de 2019, teniendo la el partido liberal un procurador menos que los que tiene Vox actualmente. El candidato ha insistido en que no han pedido "ni más ni menos" que otros partidos y que han solicitado "lo mismo que el resto".
Con todo, el candidato de Vox ha dicho que alberga "la esperanza sobre la posibilidad de un acuerdo de Gobierno" y ha incidido en algunas cuestiones que para el partido son fundamentales en ese proceso de negociación, como la derogación de la ley de violencia de género autonómica o el decreto de memoria histórica. "Proponemos que todas las victimas de violencia intrafamiliar tengan la misma cobertura y el mismo acceso a ayudas sociales", ha señalado. Con todo, ha incidido en que en la reunión de este miércoles no se ha entrado "en el detalle" de ninguna de estas medidas.
García-Gallardo no se ha pronunciado acerca de la crisis interna que vive el PP a nivel nacional, asegurando que "son ellos los que deben resolver esa crisis", ni sobre la posibilidad de que el presidente gallego Alberto Núñez Feijóo tome las riendas del partido en el próximo Congreso extraordinario. "Alberto Nuñez Feijoo no se ha presentado a las elecciones de Castilla y León, y me reconforta que mi interlocutor sea el líder del PP en Castilla y León", ha dicho. Además, ha asegurado que Mañueco le ha informado en la reunión de que "tiene autonomía para tomar la decisión que el considere correcta" con respecto al futuro pacto de Gobierno.
Críticas al Gobierno del PP en Castilla y León
El candidato de Vox ha sido crítico con las políticas llevadas a cabo por el PP durante sus 35 años de Gobierno en la región. "Considero que hay una normativa de izquierdas en Castilla y León y nosotros discrepamos de esa normativa", ha asegurado. García-Gallardo ha desglosado algunas de esas políticas con las que no está conforme. "Vemos como a nivel presupuestario en la Junta de Castilla y León se han establecido cuotas, la importancia del lenguaje inclusivo, activistas en los colegios manipulando a los niños y es algo que queremos evitar", ha dicho. Además, ha cargado contra un tipo de inmigración que, considera, tiene una capacidad de adaptación "limitada" a la sociedad. "La población del norte de África ha protagonizado agresiones en manada a mujeres y queremos evitarlo", ha denunciado.
Con todo, ha afirmado que a pesar de estas discrepancias con el Ejecutivo autonómico "respeta" a los electores del PP y que está "deseando" entenderse con ellos. García-Gallardo ha asegurado que no quiere repetir un pacto parecido a los existentes en la Comunidad de Madrid, Andalucía o Murcia, que considera un fracaso. "Esa experiencia ya la hemos tenido y hemos visto como no se han respetado los pactos", ha dicho. Y ha insistido en la línea oficial marcada por la dirección de su partido desde que se conoció la convocatoria de elecciones anticipadas en la región. "Hemos sido claros al respecto, estas elecciones son un punto de inflexión: o bien entramos al Gobierno o votaremos en contra".