El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, pidió este viernes al futuro líder del Partido Popular y presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, que se deje de “excusas de mal pagador” porque el PSOE le ofreció la “alternativa” de abstenerse en Castilla y León si establecían un “cordón democrático” a Vox, según ha informado la agencia Ical.
Así lo trasladó en la rueda de prensa posterior a la cumbre informal de jefes de Estado y de Gobierno de la UE celebrada en Versalles (Francia) cuando se le preguntó por el pacto del PP con Vox en Castilla y León que materializa en el primer gobierno de coalición del que forman parte los de Santiago Abascal.
Sánchez comentó, pero sin desvelar quiénes, que “algunos” mandatarios le han hecho “comentarios” sobre ese acuerdo que, según repitió el presidente del Ejecutivo en varios momentos, una agencia internacional lo resume como un momento “muy grave y preocupante” porque “la ultraderecha por primera vez desde Franco va a participar” en un gobierno.
El jefe del Ejecutivo lamentó que ahora “el mundo piensa que la derecha española ha claudicado ante la ultraderecha” y, por ello, sostuvo que “es necesario que cada cual” adopte sus posiciones.
Pero alertó de que hay que “pasar de la ambigüedad a lo concreto”, y “lo concreto es que cuando el PP ha tenido que optar, lo dirija quien lo dirija, ha optado no por el cordón sino por abrazar a la ultraderecha”.
Ante la argumentación del PP de que debe gobernar siempre la primera fuerza, el también líder del PSOE ironizó al preguntarse si los populares están hablando de Andalucía o de la ciudad de Madrid, o de Ourense, citando ejemplos de instituciones donde gobierna un dirigente del PP pese a que no haber vencido en las urnas. Por eso, indicó que cuando el PP habla de la primera fuerza política se refiere a cuando esa primera fuerza es este partido.
Sánchez comentó que le gustaría que el PP se “asemejara” al centro derecha europeo que, como en el caso de Turingia (Alemania) donde el partido que lideraba entonces Angela Merkel, la Unión Cristianodemócrata (CDU), impidió un gobierno de la ultraderecha.
Nadia Calviño está preocupada por la entrada de la "ultraderecha" en un Gobierno
La vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, afirmó hoy que le “preocupa mucho” que “por primera vez tengamos a la ultraderecha en un gobierno autonómico”, tras el pacto entre PP y Vox en Castilla y León.
“No se entiende por parte de los países europeos en los que hay un rechazo absoluto a la extrema derecha”, agregó, para destacar que los discursos de Vox son “retrógrados y antifeministas” y que “los primeros gestos” del que se prevé que presida el PP, Alberto Núñez Feijóo, “no son para romper” con esos discursos.