Una marcha atrás. El vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo, ha querido matizar que el recorte del 50% de las ayudas destinadas al diálogo social (20,3 millones) anunciadas la pasada semana por él y por el consejero de Industria, Mariano Veganzones, “no significa que haya un recorte de 20,3 millones de euros en subvenciones”, sino que se irán “concretando según su naturaleza, y tendrán que acudir en "concurrencia competitiva”, ha afirmado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, que ha contado su participación.
“El impacto es 20,3 millones de euros, pero no todas las ayudas son directas para los sindicatos, otras son de diferentes naturaleza. Les facilitamos una lista con las medidas, y hay que hacer un ejercicio de análisis de cada una. Estas ayudas pasarán de ayudas directas a concurrencia competitiva”, ha afirmado, y ha explicado que “tendrán que demostrar si son los mejores para llevar a cabo esas políticas”, como en el caso de cursos de formación o cátedras universitarias. Incluso ha llegado a decir que los medios de comunicación "usaron titulares de brocha gorda". "Reivindicó que las medidas se vean de manera sigular, pido a los periodistas que hagan un análisis serio de lo que anunciamos. 10 medidas que se irán aplicando según su propia naturaleza y su tiempo".
Gallardo ha apostado por “creer en el diálogo social” lo mismo que hace el Gobierno de Castilla y León”, pero no a cualquier precio. “Toda la sociedad debe demostrar la utilidad de su trabajo”, ha apuntado para recordar que esta medida forma parte de las medidas establecidas en el acuerdo de formación de Gobierno “de revisar el gasto público”.