El vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, ha vuelto a ser el centro de todas las miradas durante su intervención en la sesión de las Cortes de esta tarde. En esta ocasión, la polémica en el hemiciclo autonómico ha llegado cuando el líder de Vox ha acusado al PSOE de ser la “banda criminal de Sánchez” algo que ha sentado muy mal a la bancada socialista que ha pedido inmediatamente al vicepresidente que se retractara de sus palabras y lo retirara del diario de sesiones, algo a lo que se ha negado. Al contrario, lo ha vuelto a confirmar y acusar al partido de una “historia de crímenes” con “el mayor delito de corrupción visto en Europa”.
El Grupo Socialista ha estallado en palabras de su procuradora Patricia Gómez que ha exigido al presidente de las Cortes, Carlos Pollán, llamar al orden al político de Vox. Hasta en tres ocasiones Gallardo se ha negado a retirar las palabras. Y esto ha provocado que la vicepresidenta segunda de la Cámara, Ana Sánchez, se haya levantado y se haya ido.
Todo se encendió cuando García-Gallardo pidió al PSOE que dijera "al líder de su banda criminal, el señor Sánchez” que “se vaya y dígale que se vaya cuanto antes a liderar la Internacional Socialista. Los españoles no aguantan ni un minuto más los crímenes del señor Sánchez que arruinan a los españoles y los condenan a la pobreza”, así argumentó su intervención a la pregunta del procurador José Luis Vázquez: “¿Considera el vicepresidente de la Junta de Castilla y León necesario cumplir con los objetivos de la Agenda 2030?”, que anteriormente había tachado a Gallardo "de patriota de pacotilla".
Inmediatamente, la procuradora Patricia Gómez pidió la palabra y solicitó al vicepresidente que lo retirara “si le queda un ápice de democracia”, por “faltar gravemente” al PSOE" y al presidente del Gobierno, “elegido democráticamente”, y solicitó al presidente de las Cortes que le llamara al orden. Algo que no se produjo. Gallardo ha insistido: “No tengo intención de retirar nada, el PSOE tiene una historia criminal constatada”. Posteriormente el presidente de las Cortes ha ordenado seguir con la sesión “con un mínimo de orden”.
Agenda 2030
Previo a la bronca, García-Gallardo había calificado a la Agenda 2030 de “excusa” de los “progres” ante el “retroceso” de Europa, la “destrucción del tejido productivo y el debilitamiento de la soberanía de los estados nación”, bajo 17 “eufemismos”, como son los Objetivos de Desarrollo Sostenible. “Ustedes engañan a las personas de buena fé, habalan de ingeniería social de género y verde y están provocando el fin de la riqueza”. "Quieren Comunidades sostenibles, y todo lo que hacen es acabar con las conquistas sociales, por ejemplo el tener un vehículo en propiedad, acceder al centro y comer carne".
otro de sus argumentos ha sido que la igualdad de género de la Agenda 2030 busca “enfrentar” a hombres y mujeres, “destruir las familias y enfrentar a unas personas contra otras". También ha afirmado que los derechos humanos no salieron de Nueva York, sino de la “monarquía” de Castilla y León.
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