Los castellanos y leoneses han rendido tributo en el día de hoy a sus difuntos con motivo del Día de Todos los Santos donde la lluvia dio tregua. Con mucha emoción y recuerdos de los seres queridos, la jornada se llenó de color gracias a las flores que inundaron los diferentes cementerios, según informa Ical.
En León, debido a la gran afluencia, se establecieron diferentes medidas para evitar superar la capacidad de 9.654 personas que tiene de aforo el recinto. Asimismo, se establecieron dos servicios especiales de autobuses con el fin de evitar atascos.
En Salamanca también veneraron a sus difuntos. Similar a la situación en León, también se llevó a cabo un dispositivo que evitara largas colas de tráfico y el incremento de servicios en la línea 4 de autobuses con una frecuencia de 12 minutos.
En Valladolid tanto el equipo de Gobierno como el arzobispo Luis Argüello homenajearon a ilustres de la ciudad, así como a policías locales y bomberos que fallecieron en acto de servicio. Todo ello en los cementerios de las Contiendas y el Carmen.