La Junta de Castilla y León publicará mañana 14 de abril una norma a través de la que se equipararán las indemnizaciones que reciben los ganaderos afectados por los ataques de lobo de la zona norte de Duero a los del sur, al tiempo que se incrementarán las ayudas en ambos casos para incluir, entre otras cuestiones, las pérdidas por núcleo cesante, según ha anunciado hoy el consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones.
Unas ayudas que pasan de 2 millones a superar los cinco millones de euros. Estas compensaciones serán retroactivas al 2 de septiembre de 2021, fecha cuando se incorporó al lobo, según el Ministerio, al LESPRE.
Igualmente mediante esta nueva norma, que se publicará en el BOCYL el 14 de abril próximo, se incrementarán sustancialmente los baremos definidos hasta la fecha para adecuarse a los valores de mercado por el daño emergente, es que el valor intrínseco de los animales afectados, incluyéndose también una partida correspondiente a los gastos fijos del titular de la explotación asociado a la gestión del siniestro, describiéndose e incrementándose los pagos compensatorios por el lucro cesante, que incluye la pérdida de subvenciones y rendimientos futuros (fertilidad, producción o valor genético), y también otros gastos variables, como gastos veterinarios de animales heridos, o eutanasia de ejemplares atacados por lobo. También se reconoce un incremento del 10 % como bonificación por la adopción de medidas preventivas.
Suárez-Quiñones ha explicado que la nueva orden establecerá los daños compensatorios por daños a la ganadería producidos por el lobo que tienen como objetivo principal extender al norte el régimen de pagos compensatorios que ya se aplican en el sur de Duero, a lo que se sumará un incremento en ambos casos tanto del baremo de los pagos que se van a realizar por daño emergente como por núcleo cesante.