Hay alimentos que o los amas o los odias. Es el caso del queso. Pero cuidado con quienes deciden amarlo porque se termina convirtiendo en prácticamente una adicción. Lo cierto es que es muy complicado resistirse a sus encantos porque hay muchos tipos y muchas formas de consumirlo.

Es habitual toparte con este alimento en innumerables platos. Por eso quien no lo ama, lo tiene muy complicado para escapar de él. Además de ser una fuente de proteína, cada provincia tiene uno que le caracteriza.

Algunos son realmente populares en el país, y otros no tantos. Pero ¿tienes claro cuáles son los favoritos de Castilla y León? Un listado elaborado por Tasteatlas lo revela. 

Con los ojos cerrados, cuando alguien piensa en esta Comunidad le viene a la mente el Queso de Burgos y es que se ha convertido en todo un referente a nivel nacional. Es un queso blando y suave elaborado con leche pasteurizada o no pasteurizada de vaca y oveja. Y no solo te lo puedes encontrar a la hora de comer, sino que son muchos quienes lo utilizan de postre con un poco de membrillo, miel o nueces.

En la provincia de Ávila destaca especialmente el Monte Enebro. Un queso español de maduración suave producido por Rafael Báez y su hija Paloma. Está hecho de leche de cabra pasteurizada y envejece durante 6 a 8 semanas. Tiene forma de tronco. La corteza llama especialmente la atención puesto que va cubierta de moho gris y negro. Los aromas son intensos y los sabores picantes.

El Queso Zamorano es uno de los favoritos de la Comunidad. Está elaborado a partir de la leche de razas ovina Churra y Castellana. Y, como su propio nombre indica, proviene de la provincia de Zamora. El periodo de maduración depende del peso que tiene, pero suele varias de 60 a 100 días. En ese tiempo, lo van girando y frotando con aceite de oliva. Esto provoca que la corteza vaya cogiendo el aspecto marrón que tiene una vez finaliza. El sabor tira a picante.

Sin salir de la provincia de Zamora, hay otro queso que destaca especialmente. Se trata de Beato de Tábara, un queso español procedente de San Martín de Tábara. El queso se hace con leche cruda de cabra y, en general, se deja envejecer de 60 a 100 días, como el anterior. La corteza es mohosa, pero la textura es semifirme y densa. El sabor es dulce aunque cuenta con un gustillo a notas herbáceas.

En la provincia de León destaca, especialmente, el queso Leonora. Un queso hecho de leche pasteurizada con una corteza madurada con moho que, en ocasiones, está moteada con manchas grises. Con el transcurso del tiempo, la pasta se va descomponiendo debajo de la corteza y se convierte en líquida. Cuando es joven, los sabores son cremosos y, con la edad, va siendo más fuerte e intenso.  

Continuando por la provincia de León hay otro que es una delicia para el paladar. Es originario de la localidad de Ambasmestas y se llama Veigadarte. Está hecho de leche de cabra pasteurizada y se deja envejecer durante un mes hasta que se consume. Para su elaboración se utilizan leches de dos razas españolas: Florida y Murciana. Tras la corteza cubierta de ceniza, la textura es cremosa. Los aromas son terrosos y los sabores son ácidos. Son muchos quienes recomiendan su maridaje con una copa de vino espumoso y unas pocas almendras.

Estos son algunos de los favoritos por los castellanos y leoneses, pero no los únicos que hay porque, sin duda, la Comunidad es muy rica en este tipo de producto.