En Castilla y León hay tres minas que son “ilegales”, así lo notifica el Observatorio Ibérico de la Minería (MINOB). Se trata de una iniciativa de ciudadanía ambiental que está respaldad por el Ministerio de Derechos Sociales y la Agenda 2030. Desde hace unos meses elabora un mapa en el que señala las minas que existen en España y que no cumplen con los derechos ambientales y/o sociales. En todo el país refleja que hay más de 100, aunque es cierto que muchas otras se encuentran en plena examinación y podría subir hasta las 400 explotaciones.
De este centenar de minas que para el Observatorio Ibérico de la Minería (MINOB) son “ilegales”, en Castilla y León hay ocho repartidas entre León, Zamora, Soria y Salamanca. ¿Por qué son ilegales? Pues el MINOB hace un estudio detallado de cada una y ofrece sus razones. Aunque de manera global, esta calificación llega por cometer infracciones como la contaminación de suelos, impactos en la zona para las especies y hábitats protegidos, mala gestión de residuos, impactos en la salud humana, impactos en la Red Natura 2000 o también en el patrimonio cultural.
Estas son las ocho minas que el Observatorio Ibérico de la Minería incluye en su listado:
Mina Los Santos (Salamanca)
La mina se explotó a cielo abierto entre 2006 y 2020. Finalizada la producción comercial, la empresa se declaró en suspensión de pagos, dejó de abonar los cánones de arrendamientos a los ayuntamientos y, hasta la fecha, no ha completado los trabajos de restauración previstos. Se realizaron parcialmente trabajos de restauración sin llegar a completarse. Aunque estaba en estudio la ampliación de la mina con una etapa de explotación subterránea parece haberse descartado su viabilidad.
Entre las infracciones se incluyen una medio ambiental, ya que el proyecto se estableció en un área de campeo de milano real (Milvus milvus), constatándose al menos la presencia de una pareja en la zona. Se trata de una especie en peligro de extinción según el Catálogo Español de Especies Amenazadas, e incluida en el Anexo I de la Directiva de Aves. También de derechos laborales, ya que se apunta a que En febrero de 2020 la empresa despidió a todos los trabajadores. Durante el periodo de explotación Daytal recurrió al uso de empresas de trabajo temporal y al uso de falsos autónomos para los servicios de la mina, siendo condenada por despido improcedente.
Cantera de Peña do Rego (León)
La explotación se desarrolló ilegalmente hasta 2014 en la zona periférica de protección del BIC y monumento natural de Las Médulas, declarado Patrimonio de la Humanidad, sin sujeción a procedimiento de Evaluación de Impacto Ambiental y sin Licencia Ambiental. Su directivo fue condenado a 4 años de cárcel por delitos contra el medioambiente. Según este informe, la mina permaneció activa durante años incluso después de que por orden judicial se decretase su suspensión cautelar en 2009. Las obras de restauración se iniciaron una década después, en 2022, a cargo de la Administración Pública con un coste de más de 1 millón de euros.
Mina de Borobia (Soria)
La mina se encuentra próxima a varios espacios protegidos y ha sido sancionada por vertidos. Durante la tramitación, se desplegó una intensa campaña de ingeniería social, aunque una vez obtenidas las autorizaciones, las promesas se incumplieron. Se pretendió aplicar ilegalmente una DIA de 2010 sobre una superficie mayor que la evaluada. La mina extrae magnesita.
Sus infracciones son medioambientales, ya que se encuentra sobre el acuífero del que mana la cabecera del río Manubles, que atraviesa el LIC Sabinares de Ciria-Borobia, espacio de la Red Natura 2000 situado a menos de 10 km aguas abajo de la explotación. La explotación se encuentra además a muy pouca distancia, 1,5 km, del Parque Natural del Moncayo (LIC). El mismo acuífero está igualmente comunicado con las cuencas de los ríos Isuela y Aranda. Tras varias denuncias de colectivos ecologistas, en 2017 la Confederación Hidrográfica del Ebro impuso una sanción a la empresa por vertidos al río Manubles con alta presencia de limos. También autorizaciones, evaluación de impacto y restauración y de Derechos civiles y contrainsurgencia corporativa
Mina El Feixolín (León)
El Feixolín es una mina de carbón a cielo abierto en el valle de Laciana. Según el informe de MINOB, la explotación ocupó ilegalmente 210 hectáreas prescindiendo de la necesaria evaluación de impacto ambiental, provocando graves daños en el territorio y zonas protegidas. La explotación a cielo abierto de carbón se llevó a cabo entre 1986 y 2009, pese a que ya en 2006 se ordenó su paralización por carecer de las autorizaciones ambientales necesarias. La empresa pública Tragsa llevó a cabo la restauración entre 2014 y 2015. Finaliza la restauración del cielo abierto del Feixolín después de año y medio de trabajo y una inversión de dos millones de euros.
Según este informe, la explotación ha tenido consecuencias severas para las aguas, eliminando una laguna y dos cauces de agua. La modificación de la topografía original provocó un importante impacto paisajístico y también el deterioro de construcciones y fincas contiguas antes destinadas a la producción agrícola. Asimismo, La mina no contaba con licencia municipal de apertura, licencia urbanística, ni autorización para el uso excepcional de suelo rústico. La actividad no se había sometido a evaluación de impacto ambiental y no contaba con declaración de impacto ambiental. Sin embargo, las administraciones local y regional toleraron la continuidad de la explotación hasta 2009. Asimismo, los proyectos de El Feixolín no fueron sometidos a información pública según los cauces legales, avanzando mediante hechos consumados.
Pizarrera Nano (León)
Explotación situada sobre el LIC de Riberas del Río Sil y afluentes, que ha ocupado con sus residuos, llevando a que entre 2002 y 2011 la Confederación Hidrográfica Miño-Sil incoase 12 expedientes sancionadores. La explotación se abandonó en 2017 sin ningún tipo de restauración.
La explotación se encuentra a escasa distancia del LIC Os Ancares-Courel (Red Natura 2000) que también es Zona de Especial Protección para el oso pardo. Desde el punto de vista urbanístico, la explotación afecta a terrenos clasificados como suelo no urbanizable de especial protección de ecosistemas singulares, en el que están prohibidas las actividades que impliquen transformación del suelo. En 2012 el Servicio Territorial de Fomento inicia expediente sancionador y de restauración de la legalidad urbanística, imponiéndole una multa de 10.000 euros en 2013.
La explotación se abandona sin restaurar, situación que se mantiene al no existir garantía suficiente para ejecutar la restauración. En 2020 se determina el estado de abandono definitivo de la explotación durante la instrucción de un expediente sancionador y de incautación de avales del Servicio Territorial de Industria.
Proyecto minero Valtreixal (Zamora)
Proyecto de mina que prevé ocupar más de 200 hectáreas con cortas a cielo abierto y escombreras en el LIC de Sierra de la Culebra, 4 km aguas arriba del Parque Natural del Montesinho, en Portugal. El proyecto fue sometido a información pública en abril de 2019 y está pendiente de autorización. La empresa preveía abrir la mina en 2021.
El proyecto propone una explotación a cielo abierto, a pocos metros del río Calabor, junto con una escombrera de materiales potencialmente generadores de drenajes ácidos de 23 millones de metros cúbicos, ocupando más de 200 hectáreas en pleno LIC de Sierra de la Culebra (Red Natura 2000) y 4 km aguas arriba del Parque Natural del Montesinho, en Portugal. Ambos espacios forman parte de la Reserva de la Biosfera Transfronteriza Meseta Ibérica, siendo especialmente importante por la presencia de lobo.El proyecto se realizará sobre terrenos comunales pertenecientes a la Junta Vecinal de Montes Vecinales en Mano Común de Calabor.
Louseira de Texeiras (León)
Pizarrera que inició su actividad como explotación 'experimental' en 1992, colmatando de residuos mineros varias zonas del rego do Rebolo y afectando a zonas de Red Natura 2000. Se sitúa sobre terrenos comunales que fueron cedidos de forma poco transparente. La explotación se inició en 1992 con el pretexto de un frente experimental, abandonándose durante varias décadas. En 2018 se aprobó un proyecto de explotación, pero todavía no se ha iniciado.La explotación 'experimental' llevada a cabo a principios de los años 1990 generó escombreras sobre zonas de bosque autóctono y cauces, sin que nunca se llevara a cabo ningún tipo de restauración.
Varios colectivos vecinales y ambientales alegaron en su día tanto al pase a concesión de explotación como a la prórroga de la DIA, denunciando los impactos generados y la falta de restauración. En 2000 la Asociación de Vecinos Val do Rebolo denunció las irregularidades existentes y la falta de transparencia en la cesión de terrenos comunales a los titulares mineros.
Canteira Mesa de Reis (León)
Cantera situada en el límite entre El Bierzo y Galicia, a tan solo 150 metros del LIC Os Ancares-Courel. A pesar de incluir terrenos en ambas comunidades autónomas, la concesión fue otorgada por la Junta de Castilla y León. El estudio de impacto ambiental ocultó la proximidad e impactos sobre espacios de la Red Natura 2000. La cantera se inició en 1998, reclasificándose en 2011 como concesión de explotación y presentando en 2021 un nuevo proyecto. Se trata de una explotación de cuarcita.
La asociación Indignados de Gestoso realizó numerosas peticiones de información ambiental al Ayuntamiento de Oencia, que las ignoró por completo. En 2019 el Comisionado de Transparencia de Castilla y León estima la reclamación, pero el ayuntamiento decide ignorarla, al igual que sucesivos recordatorios.