La gran sorpresa que nadie vio venir: Ana Redondo, mano derecha de Puente en Valladolid, ministra de Igualdad

Esta nadie la vio venir. Ana Redondo García, vallisoletana de 1966, es la gran sorpresa en el nuevo gobierno de Pedro Sánchez. La que fuera concejala de Cultura y número dos de Óscar Puente en el Ayuntamiento de Valladolid será la nueva ministra de Igualdad en sustitución de Irene Montero (Podemos). De esta manera, Puente, además de lograr la cartera de Transporte y Movilidad Sostenible, obtiene un sorprendente sillón para su compañera y amiga.

Currículo

En su currículo no aparece nada relacionado con las funciones de Igualdad, cumpliendo así el perfil de los nuevos ministros, que no se busca el perfil profesional pero sí el político. Redondo recoge uno de los ministerios más polémicos y donde tendrá que lidiar con la ley del sí es sí. Profesora de Derecho Constitucional, además es secretaria general de la Agrupación Local de Valladolid, desde 2022.

Miembro del PSOE, fue secretaria de Formación del PSOE de Valladolid. Fue elegida procuradora por la provincia de Valladolid en las elecciones a las Cortes de Castilla y León de 2007, desempeñando el cargo de viceportavoz del Grupo Parlamentario Socialista. Tras la llegada de Óscar López a la secretaría general del PSOE de Castilla y León, es nombrada portavoz del Grupo Socialista. Desde el 20 de octubre de 2014 es de nuevo portavoz del Grupo Socialista en las Cortes de Castilla y León. En las elecciones municipales del 24 de mayo de 2015 concurre como número dos de su partido al Ayuntamiento de Valladolid siendo elegida concejal, asumiendo la Delegación de Cultura y Turismo. Actualmente había había regresado a la Universidad de Valladolid. Redondo está casada y tiene dos hijas.

Posición en la amnistía

Redondo ha estado desaparecida en los últimos meses y no ha tenido una posición sobre la amnistía. Eso sí, ella siempre se ha definido como 'sanchista', por lo cual sus ideales no estarán muy lejos de los del ya presidente del Gobierno.

Balance de su gestión

Su gestión como concejala del Ayuntamiento de Valladolid es positiva. Sus últimos años fue concejala de Cultura y si por algo se caracterizó la ciudad es por impulsar sus fiestas patronales, pero además, con otros eventos, la ciudad del Pisuerga se ha convertido en un espejo para otros lugares. Eso sí, siempre se ha mantenido al lado de los colectivos LGTBI. Por ejemplo, ha apoyado en el crecimiento delFestival CinHomo y vio nacer Zorrilla Fest, todo desde el lado de la cultura.

Retos de su Ministerio

Muchos e importantes. Toma la patata caliente dejada por Irene Montero (Podemos) después de su fallida ley del sí es sí, que ha permitido la excarcelación de violadores y de su reducción de pena, algo que provocó una grave crisis y mala imagen para el gobierno. Finalmente el ministerio más polémico pasa a manos del PSOE y lo hace con un perfil de una mujer que nunca se metió en charcos. Sus retos son claros, evitar la muerte de mujeres, que está en aumento en los últimos años. Será una de las ministras que maneje más dinero en su ministerio.

La aprobación de una ley contra la trata de personas con fines de explotación sexual es otro de los temas polémicos a los que se tendrá que enfrentar.

Su nombramiento es toda una sorpresa, para un puesto para el que habían sonado nombres como los de las socialistas Andrea Fernández, leonesa.