La intensa nevada de las últimas horas continúa complicaciones en el tráfico de las provincias de Burgos y León, donde al menos diez tramos de carreteras requieren el uso obligatorio de cadenas para poder circular.

En la provincia de Burgos, se recomienda precaución al transitar por la N-232, entre Incinillas y Virtus, así como en la N-623, entre Tubilla del Agua y Virtus. Asimismo, se insta a los conductores a tener precaución en la N-629, a la altura de Bercedo. La utilización de cadenas es obligatoria en la BU-572, en Río de Lunada; en la BU-571, en Río Trueba; en la BU-570, entre Río de Lunada y Rioseco; y en la CL-629, entre Cernegula y Valdenoceda.

En León, la situación no es diferente, con varios tramos que requieren el uso de cadenas para garantizar la seguridad vial. Es obligatorio el uso de cadenas en la LE-126, a la altura de La Baña, así como en la LE-333, entre Puebla de Lillo y Maraña. También se necesita precaución en la LE-331, en Puebla de Lillo, y en la LE-234, entre Puente Almuhey y Siero de la Reina. Otros tramos afectados incluyen la LE-233, entre Besande y Siero de la Reina, y la LE-215, entre Boca de Huergano y Besande.

Hasta diez centímetros de nieve

La Agencia Estatal de Meteorología mantiene la alerta amarilla para la provincia de Burgos debido a las nevadas previstas para hoy, 7 de enero. Se espera que estas nevadas afecten especialmente a la Cordillera Cantábrica, con la posibilidad de acumulaciones de hasta diez centímetros en algunos puntos.

La alerta abarca también el Condado de Treviño, donde se espera la presencia de nieve, aunque con menor intensidad. Asimismo, se prevén nevadas en zonas de la Cordillera Ibérica, lo que podría afectar las condiciones de circulación en carreteras de las provincias mencionadas.

En cuanto a las temperaturas, para la jornada de hoy no se anticipan cambios significativos, aunque se espera una bajada en los próximos días, especialmente a partir del lunes. Entre las capitales de provincias, se pronostica que las máximas oscilen entre los nueve grados en Zamora y los cinco grados en Burgos y Ávila.