Todos los grupos políticos de las Cortes de Castilla y León respaldaron hoy una reforma del actual modelo de financiación autonómica que tengan en cuenta singularidades de la Comunidad como sus elevados índices de envejecimiento, despoblación y dispersión, tal y como defendió hoy el presidente del Consejo de Cuentas, Mario Amilivia, durante la presentación del informe de ‘Análisis de la gestión del programa presupuestario de Deuda Pública y su relación con el sistema de financiación y el gasto en materia de sanidad y educación, ejercicios 2004-2021’, en el que se recomienda defender un sistema de financiación en el que se ponderen las variables no poblacionales, tal y como contempla el Estatuto de Autonomía.

A pesar de esta coincidencia, los grupos de la oposición lamentaron que el incremento de la deuda en Castilla y León no está teniendo un reflejo en los servicios públicos esenciales, a la vez criticaron la gestión de la Junta, mientras que PP y Vox defendieron que la actual situación financiera de la Comunidad es mejor que la del conjunto autonómico.

La portavoz del Grupo Socialista, Rosa María Rubio, lamentó que Castilla y León sea la sexta comunidad más endeudada a pesar de no contar con unos servicios públicos de calidad, a la vez que defendió la gestión del Gobierno central durante el Covid y de los ingresos extraordinarios que inyectó a las comunidades para hacer frente a la pandemia.

A su vez, Rubio recordó que en 2019, la Junta incumplió el objetivo de estabilidad presupuestaria, lo que provocó que no pudiera acudir al Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) y se viera obligada a recurrir al mercado financiero privado, lo que supone un mayor gasto. Así, indicó que hasta el año 2030 la Comunidad tendrá que hacer frente anualmente a un pago de entre 1.200 y 1.400 millones de euros de amortización y lamentó que la Junta ha entrado en una espiral en la que, con menos recaudación, cada vez se endeuda más para poder amortizar la deuda.

En su intervención, la portavoz socialista también reconoció que el actual sistema de financiación autonómico es insuficiente y reclamó un sistema “justo” para Castilla y León.

Mientras tanto, la popular Rosa María Esteban, defendió el compromiso de la Junta con la calidad de los servicios sociales esenciales y puso en valor que los principales indicadores sitúan a la educación, la sanidad y los servicios sociales de la Comunidad al frente del conjunto autonómico. Además, indicó que mientras el gasto social de Castilla y León creció en los últimos años un 28 por ciento, la financiación recibida por el Gobierno solo lo hizo un 2 por ciento.

Principio de solidaridad

A su vez, defendió la buena gestión fiscal por parte de la Junta y recordó a la portavoz socialista que los fondos extraordinarios del Covid fueron aportados por la Unión Europea y no por el Gobierno de Pedro Sánchez, para recordar que la Constitución establece el principio de solidaridad entre comunidades. En este sentido, recalcó que es urgente la reforma del sistema de financiación para que se tenga en cuenta el principio de solidaridad, así como la puesta en marcha herramientas, tanto a nivel nacional como europeo, para luchar contra la despoblación.

Por su parte, el portavoz de Vox en la Comisión de Economía y Hacienda, Francisco Javier Carrera, defendió que la situación financiera de Castilla y León es aceptable y mucho mejor que la de la mayoría de la comunidades. Así, indicó que mientras la deuda del Estado sobre el PIB en el periodo analizado por el informe del Consejo de Cuentas ha pasado del 45,3 al 116 por ciento, la de Castilla y León ha crecido del 3,19 al 22,7 por ciento.

A su vez, argumentó que la calificación crediticia otorgada por la agencia Moody's a Castilla y León es mucho mejor que la recibida por la mayoría de las comunidades  y reiteró que la infrafinanciación de servicios públicos esenciales demuestra la necesidad de cambiar el actual modelo de financiación.

Desde el grupo UPL-Soria Ya, José Ramón García argumentó que al contrario que el discurso de la Junta, “estamos muy lejos de ser una comunidad ahorradora”, a la vez que lamentó que el incremento de la deuda no ha supuesto una mejora de la calidad de vida de los castellanos y leoneses.

Desequilibrio provincial

A su vez, y además de reclamar una modificación del modelo de financiación, también pidió medidas para evitar el desequilibrio entre provincias y en especial para frenar la despoblación que de una forma “sangrante” se está cebando con las provincias de León y Zamora.

Por último, desde el Grupo Mixto, el procurador de Podemos Pablo Fernández, calificó de “pésima” la gestión de la Junta con un incremento “bestial” de la deuda que no ha tenido ningún reflejo positivo ni en los servicios sociales esenciales ni en las infraestructuras, a la vez que aseguró que el endeudamiento ha crecido de forma exponencial hasta convertirse en “estructural”.  

Además de reclamar la Gobierno que la reforma del sistema de financiación es urgente y de reprochar al PP que no lo hiciera cuando tuvo mayoría absoluta en el Congreso de los Diputados, también advirtió que las elevadas amortizaciones que tiene que afrontar en los próximos años la Junta lastrarán los servicios sociales.