Alfonso Fernández Mañueco, presidente de la Junta de Castilla y León, ha propuesto hoy a Teresa Ribera, ministra para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, una demanda largamente demandada. Que Zamora y “otras zonas afectadas” por la despoblación se beneficien de una fiscalidad diferenciada, como ya disfruta otra provincia castellana y leonesa, Soria, además de Cuenca y Teruel. En los casos de estas tres provincias, los costes laborales están bonificados en un 90%. “Zamora encajaría”, ha defendido el jefe del ejecutivo autonómico, quien ha informado de que la Junta y el Gobierno analizarán de forma conjunta las medidas puestas en marcha estos dos años para la provincia soriana.

El presidente de la Junta ha mantenido esta mañana un encuentro con la ministra, al que ha acudido también acompañado por Juan Carlos Suárez-Quiñones, consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, y en el que han tratado financiación autonómica, despoblación y políticas del agua y energía, según informa la agencia Ical.

En este sentido, Ribera y Mañueco se emplazaron a elaborar, con el compromiso la vicepresidenta, un “trabajo bilateral para dar seguimiento a algunas políticas que incluyan medidas fiscales sobre incentivos y reducción de cuotas”, si bien apostó primero por hacer una evaluación de los resultados y posibilidades de mejora. “Es uno de los aspectos a los que prestamos más atención y puedo asegurar que nos sentimos particularmente comprometidos”, dijo Ribera.

Así, en materia de despoblación, el presidente autonómico admitió que es una problemática que afecta al conjunto de la Unión Europea, “pero más a las zonas de interior”, como es el caso de Castilla y León, por lo que reclamó a Ribera una financiación “imprescindible y adecuada de los servicios públicos”, capítulo en el que mencionó la necesidad de mantener la sanidad rural, las escuelas con tres alumnos o los servicios a la dependencia.

También llamó la atención a la ministra de las 350 paradas de líneas de autobuses que podrían verse afectadas “por la supresión de concesiones del Estado”. “Necesitamos que sigan existiendo”, dijo Fernández Mañueco, quien demandó también una “simplificación administrativa en el medio rural” y trabajar “conjuntamente de cara al futuro”.

Por su parte, Teresa Ribera defendió que sobre despoblación, la Junta y el Gobierno tienen una “convicción compartida” de que se trata de “desafío que requiere políticas y decisiones en ámbitos de actuación muy diferentes, pero también la complementariedad de aquellas que se tomen en distintos niveles institucionales”.

“Sabemos que hay una demanda fuerte sobre la sociedad española de hasta qué punto es capital revertir la despoblación, con servicios públicos, vivienda, conectividad, movilidad e innovación” para todas las actividades, principalmente, dijo, las del sector primario. Además, Ribera recordó una de “las grandes prioridades de la pasada legislatura” fue la política de acceso a grandes servicios básicos en no más de 30 minutos.

En este campo, continuó la vicepresidenta, Junta y Estado han puesto el foco en vivienda, movilidad y “extraer lecciones que permitan mejorar y fortalecer la capacidad de utilizar fondos estructurales y medidas de acompañamiento sobre el territorio”, con el objetivo de “compensar a los distintos territorios, que sería enormemente justo para generar oportunidades y afianzar ese tímido asentamiento de la población, revirtiendo la tendencia de décadas”.

Respecto al tema de la energía, Mañueco ha destacado el potencial de la Comunidad, que genera un "55% más de la que consume", y ha recordado que Castilla y León es "energéticamente solidaria". Ahora bien, ha incidido en que necesita una red de suministro que se adecúe a los proyectos empresariales e industriales, que son una fuente de empleo y riqueza.

Por este motivo, el presidente de la Junta ha pedido a Ribera que, en la planificación del Gobierno para la Red Eléctrica 2025-2030 se incluyan las pertinentes mejoras que se necesitan para atender las demandas de consumo en las áreas industriales; además de que se cambie la normativa para favorecer el autoconsumo y el consumo en zonas donde se produce la energía.

Una reclamación que ya avanzó Suárez-Quiñones este pasado jueves durante la inauguración del FORO ENERGÍA, organizado por EL ESPAÑOL - Noticias de Castilla y León en el NH Ciudad de Valladolid. Un encuentro donde los principales agentes del sector y expertos abordaron los retos de futuro bajo la premisa de poner el foco en las ventajas de nuestra Comunidad.

Asimismo, en otro de los apartados, Mañueco le ha trasladado a Ribera la necesidad de que se refuercen las infraestructuras hidráulicas y la gestión del agua, dado que considera primordial garantizar el servicio en cantidad y calidad. Ha solicitado una mayor capacidad de regulación en la Cuenca del Duero; impulsar obras y actuaciones, como la presa del río Mayor en Soria, la de Castrovido en Burgos, la central hidroeléctrica de Irueña y el recrecimiento de Santa Teresa, en Salamanca, o un nuevo embalse en el río Ciguiñuela en Segovia; y, también, un mayor esfuerzo para poder potenciar los regadíos, en algunos casos pendientes por retrasos en trámites ambientales del ministerio, como en La Cueza, Canal de San José, Canal de Pisuerga, Campillo de Buitrago, Porma sector IV, Carrión, Saldaña o Villamoronta.

Dentro de este apartado, el jefe del Ejecutivo autonómico ha invitado también a que el Ministerio ejecute las depuradoras declaradas de interés general del Estado en Castilla y León, ya que están pendientes más de una decena en diferentes provincias. Son las siguientes: Aldeamayor de San Martín, Ayllón, Fermoselle, San Cristóbal de Entrevías, Villanueva de Duero, Villanueva de Yeltes, Astudillo, Quintanar de la Sierra, Morales del Vino, Monfarracinos, Villaralbo, Palacios de la Sierra, Castrovido, Hacinas, Castrillo de la Reina, Vilvestre de Pinar, Canicosa de la Sierra y el Espacio Natural de los Arribes del Duero.