El portavoz de la Junta, Carlos Fernández Carriedo, ha contrapuesto este jueves el "consenso" que se alcanza, a su juicio, en Castilla y León a nivel legislativo con la situación en el Congreso de los Diputados, tras la reciente retirada de la Ley del Suelo, por no contar con el apoyo de Sumar, y el rechazo a la Ley contra el proxenetismo impulsada por los socialistas. El portavoz de la Junta, además, ha dado un consejo a Sánchez. "El diálogo y el consenso suelen funcionar", ha afirmado, asegurando que "sería bueno que en España hubiera estabilidad".

Carriedo ha asegurado que, mientras tanto, desde Castilla y León se sigue "trabajando, aprobando leyes, con estabilidad y normalidad" con el "cauce del diálogo" con todos los grupos políticos y "sumando apoyos" a las iniciativas parlamentarias. "Es importante lo que estamos haciendo, actuando por la vía de la estabilidad y el diálogo, que son dos aspectos importantes para alcanzar acuerdos", ha afirmado.

El portavoz de la Junta ha insistido en que "el diálogo y el consenso suelen funcionar y suelen ser útiles para la gente". "La estabilidad es fundamental para la confianza y la confianza es esencial para la inversión, todas las administraciones tenemos que favorecer la estabilidad y la confianza, sería bueno que en España hubiera estabilidad pero no nos corresponde a nosotros ni es nuestra función", ha señalado, aunque ha mostrado la voluntad de la Junta de avanzar en otorgar "confianza, estabilidad y seguridad" en la parte que corresponde al Gobierno autonómico.

Carriedo ha puesto como ejemplo de esos "consensos" la toma en consideración de la reforma de la Ley de Sanidad Animal este miércoles en el pleno de las Cortes y ha presumido de que salió adelante "con un amplio respaldo y sin ningún voto en contra".

"Estaremos siempre a lo que nos digan los profesionales sanitarios, especialmente los veterinarios, escucharemos también a los ganaderos para erradicar las enfermedades y también facilitar la tarea de los ganaderos", ha afirmado, asegurando que la Junta está siempre "en un proceso de mejora continua del tratamiento y la gestión de las enfermedades vinculadas a los animales" y, a su vez, "facilitando a los ganaderos sus tareas".