El calor comienza a azuzar en Castilla y León, pero esto supone que también se incremente el riesgo de incendios. Por eso, la Junta de Castilla y León declara mañana viernes 7 de junio el periodo de peligro medio de incendios forestales ante las elevadas temperaturas previstas, aunque a partir del fin de semana se espera un descenso y la llegada de lluvias. Ya será a partir del miércoles, 12 de junio, cuando activa la declaración de riesgo alto, que se mantendrá durante los siguientes cuatro meses, después del cambio de normativa anterior que era de tres.
El consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, lo ha adelantando y así mañana se declara el riesgo medio de incendios y se remitió a una rueda de prensa el próximo lunes, 10 de junio, en el Centro contra el Fuego de León, en la que presentarán más detalles del operativo previsto para esta campaña, aunque insistió en que se había reforzado desde 2020.
Asimismo, Suárez-Quiñones precisó que la declaración de peligro medio supondrá un “acopio” de medios del operativo y cambios a nivel organizativo para hacer frente a las condiciones climáticas anunciadas, marcadas por las “altas temperaturas” y la “sequedad”, aunque se esperan lluvias en varios puntos de la Comunidad. De momento, indicó que cuentan con 19 cámaras en El Bierzo (León) para vigilar los montes con diferentes sistemas y dar una respuesta anticipada.
El consejero ha defendido que están “más preparados” para afrontar fuegos “catastróficos” como los registrados hace dos años, en el verano de 2022 en la Sierra de la Culebra (Zamora), al ponerse en marcha un cambio “muy importante” de “refuerzo” del operativo.