Las autonomías siguen sin presentar sus planes de contingencia: CSIF advierte de riesgo de colapso en las zonas más turísticas y del incremento en la demora hospitalaria ante la ausencia de médicos y personal de Enfermería en la temporada de verano. Cierre de camas y centros de salud rurales, retraso de cirugías y pruebas no urgentes, plantillas bajo mínimos, traslado de médicos a zonas costeras y contrataciones de médicos en prácticas, primeros síntomas de la falta de previsión, es lo que denuncia la Central Independiente y de Funcionarios (CSIF).
CSIF lamenta que las comunidades autónomas se hayan retrasado, o ni siquiera hayan presentado sus planes de contingencia con motivo de la llegada del verano, a pesar de nuestras reiteradas peticiones para diseñarlos con planificación suficiente y ponerlos en marcha. Un año más llegamos tarde, y nuestros centros de salud y hospitales no disponen del personal de sanidad suficiente para cubrir vacaciones y reforzar las zonas turísticas más tensionadas y evitar su colapso. Este año, además del conocido déficit de personal médico en Atención Primaria. Este año se están además agravando los problemas para contratar a personal de Enfermería, lo que también está incidiendo en el cierre de camas.
La consecuencia es que las plantillas están bajo mínimos, lo que está obligando a las comunidades autónomas a cerrar camas hospitalarias, retrasar pruebas y cirugías no urgentes, unificar unidades, cambiar turnos y a trasladar a médicos de centros de salud a zonas costeras para cubrir consultas por las tardes.
CASTILLA Y LEÓN
En Castilla y León, como cada año, el plan de contingencia de verano se presenta con cierre de más de 300 camas hospitalarias y el consiguiente desplazamiento del personal para cubrir permisos en otras plantas del centro, así como reducción de la actividad quirúrgica y de consultas en general.
El número de contrataciones en verano es insuficiente, tanto en el apartado hospitalario como en Atención Primaria, por lo que se fuerza a los profesionales a cubrirse entre sí teniendo que acumular consultas. En el caso de los médicos de familia, ni siquiera la plantilla orgánica está cubierta por completo en numerosas zonas básicas, menos aún las coberturas de permisos.
El cierre de los centros de salud urbanos por las tardes en capitales como Burgos, Salamanca o Palencia redundará en una mayor carga asistencial en los puntos de atención continuada y mayor afluencia a los servicios de urgencias hospitalarios.