La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) de Castilla y León se ha manifestado este sábado, 14 de diciembre, en Madrid para pedir que se garantice una asistencia sanitaria "de calidad" para los 1,5 millones de mutualistas y beneficiarios de Muface.
Una concentración que ha congregado a funcionarios procedentes de toda España, de los que 2.500 eran de Castilla y León. Gritos de protesta se escuchaban frente a la Dirección General de Muface de Madrid con el objetivo de poder revertir esta situación.
El presidente de CSIF Castilla y León, Benjamín Castro, ha reiterado la advertencia de que la sanidad pública de la Comunidad "se va a colapsar" en caso de que el Gobierno obligue a pasar al Sacyl a los más de 100.000 beneficiarios de Muface.
Una realidad que, además, también ha sido reconocida en varias ocasiones por el consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez. Por ello, piden al Gobierno que mantengan el modelo sanitario del mutualismo administrativo.
Una situación compleja debido al "serio peligro por la falta de acuerdo entre el Gobierno y aseguradoras y la cercanía del fin de la vigencia del actual concierto". Unas movilizaciones que ya comenzaron el 11 de noviembre frente al Ministerio de Hacienda y las subdelegaciones del Gobierno de toda España.
En estas, desde el sindicato han pedido al Gobierno que "desbloquee la negociación colectiva para mejorar las condiciones laborales del conjunto de los empleados públicos, junto a la continuidad de Muface y al mutualismo".
Unas protestas que, avanzan, se van a "prolongar en el tiempo en caso de que el Gobierno siga sin reaccionar y sin garantizar la continuidad del modelo de Muface".
Desde CSIF urgen al ministro de Función Pública que responda a la petición de reunión urgente "para dar explicaciones" y aseguran que incrementarán "la presión al Gobierno con la convocatoria de paros parciales y totales en la Administración".