El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha lanzado este domingo una dura pulla al exportavoz de la formación en las Cortes de Castilla y León Juan García-Gallardo después de que dimitiese denunciando las, a su juicio, excesivas intromisiones de la dirección nacional en su acción política y haberse sentido abandonado por el partido.

"En Vox no hay baronías, ni marquesados, ni emperadores", ha afirmado Abascal en un acto en Murcia, recordando que tiene el poder "para acabar con las ambiciones" y que el partido no es "una suma de taifas al servicio de intereses regionales".

El presidente de Vox ha asegurado haber decidido la creación de un partido nacional, "no un partido que sea una suma de taifas, de intereses y de corrupciones". "Un partido nacional, al servicio de los intereses nacionales, no al servicio de intereses regionales ni de intereses personales ni de una casta dirigente corrupta", ha añadido.

Abascal ha recordado que en Vox "no hay baronías, ni marquesados, ni emperadores", en una clara referencia a Gallardo, y ha recordado que es el presidente porque hace un año le respaldaron los afiliados y decidieron apoyar unos Estatutos "que consagraban la idea de un partido nacional".

Acabar con "las ambiciones"

Además, ha cargado contra la idea de que en el partido se dirige todo desde Madrid. "Cómo que manda Madrid si el secretario general es catalán y el presidente es vasco", ha ironizado, asegurando que "mandan los afiliados que han elegido a un Comité Ejecutivo Nacional y a un presidente".

Y ha insistido en que los afiliados le han dado los poderes "para dirigir un partido y para acabar con las ambiciones y las batallitas internas y para ir todos en una dirección" y para que "no ande cada uno diciendo lo que le de la gana en función del territorio o de los intereses".

"Ese es el partido que tenemos y es el partido que vamos a tener mientras yo sea el presidente, no va a cambiar", ha afirmado, asegurando que no aceptará "ningún tipo de presión ni del PP, ni de los medios, ni del Ibex, ni de Bruselas, ni del CNI de Sánchez". "Nadie nos va a presionar ni va a torcer nuestra voluntad", ha afirmado.

Salir de los gobiernos

Abascal ha asumido también personalmente la decisión de salir de los gobiernos autonómicos que Vox compartía con los populares. "Lo asumí el día que se decidió en el Comité Ejecutivo Nacional y salí a dar la cara", ha señalado.

Y ha asumido también "la decisión de intentar crear un gran grupo en el Parlamento Europeo que acabe con el régimen de populares y socialistas".

"Yo asumo haber apoyado a Donald Trump cuando el PP estaba diciendo que era un golpista, yo asumo haber apoyado a Giorgia Meloni e invitarla a España cuando decían desde el PP y desde su prensa que era una extremista, yo asumo haber apoyado e invitado a Javier Milei cuando decían que era un loco", ha recordado.

Y ha asumido también haberse aliado con la líder de Reagrupación Nacional, la francesa Marine Le Pen, "que muy pronto será la presidenta de la República francesa". "Y entonces la prensa pepera empezará a decir otras cosas", ha zanjado.