Ha pasado justo un año desde que Pablo Casado puso fin a su andadura política presentando, tras una larga reunión con diferentes personalidades del Partido Popular en la sede de la calle Génova, su dimisión como líder de la citada formación y entregando su acta de diputado.
A lo largo de estos 365 días transcurridos, poco ha sido lo que se ha sabido sobre la nueva vida del palentino, pues desde que presentó su dimisión, apenas se ha dejado ver en público. Esto ha sembrado un ambiente de absoluto misterio que ha llevado a muchas personas a preguntarse cuál será el actual paradero del expolítico y a qué dedicará sus días, entre otras cuestiones.
Hace apenas unos días, salió a la luz que en este último año la vida de Casado ha cambiado mucho. Tanto es así, que, tal y como dio a entender él mismo durante su participación en un encuentro entre emprendedores celebrado en Menorca el pasado verano, hace tiempo que decidió sustituir su trabajo como político por un nuevo empleo en Madrid como captador de inversores para empresas de capital de riesgo en el ámbito de la defensa, de la ciberseguridad y de la política internacional. Además, según se ha comentado, hace varios meses dejó de vivir en el centro de la capital para mudarse a las afueras de la ciudad, concretamente, a una casa unifamiliar que compró y después reformó.
En su día también se dijo que, desde el momento en el que puso fin a su carrera política, el que fuera líder del Partido Popular decidió romper con todo e iniciar una nueva vida nada más y nada menos que en Estados Unidos, donde se ha rumoreado que podría estar dedicándose a gestionar la fortuna y el patrimonio de varias familias adineradas de la zona.
Según algunas informaciones, es cierto que Casado viaja mucho a Estados Unidos, pero también a Israel o Latinoamérica, con motivo de su búsqueda constante de inversores para su propio fondo de inversiones de capital de riesgo para la industria de la defensa, así como de diversos eventos empresariales en los que sigue participando.
Sea como fuere, de lo que no hay duda es de que el exlíder del Partido Popular sigue pasando parte de su tiempo en España, y ya no solo en Madrid, donde parece que sigue residiendo. Su afán de intentar pasar desapercibido, de evitar volver a copar los titulares de la prensa nacional y de buscar el anonimato suele llevarle cada poco tiempo hasta su Palencia natal, la cual se sabe que visita con cierta frecuencia junto a su mujer, la psicóloga Isabel Torres, y a sus hijos, Paloma y Pablo; y también a Las Navas del Marqués, el pueblo abulense en el que siempre ha encontrado su remanso de paz y donde, al parecer, llegó hasta a empadronarse.
Pablo Casado siempre se ha referido a Las Navas del Marqués como su pueblo: "Me siento ya un navero, me siento ya un abulense", reconoció en una ocasión. Esto es tan solo una prueba de la relación tan estrecha que el político mantiene con esta localidad de poco más de 5.000 habitantes, situada en el extremo oriental de la provincia y asentada en las planicies de la sierra del Malagón.
Hace años se dijo que allí tenía un chalet en régimen de alquiler, ubicado en la exclusiva urbanización Ciudad Ducal, que se encuentra a unos cuatro kilómetros del centro del municipio; así como que entre los planes favoritos del palentino y su familia en territorio abulense estaba el de visitar el lago de Ciudad Ducal, contemplar las preciosas vistas de la zona desde La Atalaya-Mirador y disfrutar de la gastronomía típica del enclave en el restaurante Montecarlo.
Ambas informaciones han sido confirmadas a este mismo medio por el alcalde del municipio, Javier Sastre: "Él tiene una casa alquilada como segunda vivienda o para momentos de escapada, y ellos vienen y van con toda la naturalidad", ha afirmado. "Cuando ellos vienen, recorren Las Navas, van a los restaurantes del pueblo e incluso en su faceta de político en algunas ocasiones ha llegado a participar en algunos actos oficiales", ha añadido.
El alcalde hace tiempo que no le ve, pero solo ha pasado un mes desde la última vez que le hicieron saber que el político se encontraba en el municipio: "Sé que ha estado fuera de España, pero no hace tanto tiempo desde la última vez que me han dicho que ha estado, hará un mes más o menos", ha explicado.
Sastre desconoce si a raíz de dimitir como líder del Partido Popular desde el Ayuntamiento de Las Navas se le ha llegado a plantear la posibilidad de continuar su andadura política en el municipio. Pero, si de algo está seguro, es de lo agradecidos que están con él la mayoría de sus vecinos por el simple hecho de que "siempre haga gala de que le gustan mucho Las Navas" y de que "siempre haga publicidad de ello": "Antes las presentaciones políticas siempre las iniciaba en Las Navas del Marqués", ha recordado el alcalde con cierto orgullo.
Descubriendo Las Navas del Marqués
Pero ¿qué es lo que tiene exactamente esta localidad que tanto ha enamorado al expolítico?
Además de su cercanía a Madrid, su gente, su gastronomía, su animada vida social y su tranquilidad, quizá también la esencia y belleza de sus monumentos y lugares de interés, así como su atractivo entorno natural, lo más valorado por Javier Sastre: "El entorno natural es nuestro mayor patrimonio. 97 kilómetros cuadrados de naturaleza y propiedad del Ayuntamiento", ha destacado.
Las Navas del Marqués es una localidad con mucha historia que alberga, principalmente, dos edificios de interés histórico proclamados Bien de Interés Cultural: el Castillo Palacio de Magalia y el Convento de Santo Domingo y San Pablo.
El primero, de estilo renacentista, fue construido en torno a 1540, mientras que el segundo fue fundado tan solo cinco años después y abandonado tras la desamortización de Mendizábal.
Tampoco pasan desapercibidas la iglesia parroquial de San Juan, la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, la ermita del Santísimo Cristo de Gracia, la ermita de San Antonio, ni tampoco las rutas que se pueden realizar por la zona: la de Riscos y Atalayas, la de las Esculturas, o la de los Trece Roeles, entre otras.
La localidad celebra sus fiestas patronales dedicadas al Cristo de Gracia en la semana del segundo domingo de julio, y su Semana Grande en honor al Cristo de la Salud en la semana del segundo domingo de agosto, festividades de las que, al parecer, Casado también ha disfrutado varios veranos.
En realidad, solo el círculo más íntimo del exlíder del PP conoce con exactitud cuál es su paradero exacto y cómo es realmente su día a día, ya que, si algo ha conseguido el palentino en los últimos meses, eso ha sido convertirse en la discreción personificada, pues ni siquiera en sus redes sociales ha vuelto a publicar contenido alguno. ¿Se dejará ver próximamente por Las Navas del Marqués?