El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León ha condenado a un hombre a seis años de prisión por abusar sexualmente de la nieta menor de edad de su mujer, al desestimar el recurso de apelación interpuesto por el acusado contra la sentencia dictada por la Audiencia Provincial de Ávila el 30 de noviembre de 2022, y confirmar la misma de forma íntegra. 

Los hechos se remontan a abril de 2017, cuando, aprovechando sus vacaciones de Semana Santa, la niña, que por aquel entonces tenía 10 años, se fue a pasar unos días de vacaciones a una vivienda de la familia del acusado situada en Ávila, en compañía de su abuela y el que fuera marido de esta, el agresor, además de por una nuera de la abuela y la hija menor de esta. 

A la menor se la indicó que se instalase ella sola en una habitación que contaba con dos literas, mientras que el acusado y la abuela de la niña lo hicieron en otra habitación. 

Sin embargo, durante tres días consecutivos, el acusado accedió a la habitación donde la menor dormía sola, llegando a aproximarse a ella e incluso a introducirle su mano por debajo de la ropa para realizarle tocamientos en sus partes íntimas. 

La víctima se dio cuenta de lo que estaba sucediendo, pero decidió fingir que estaba dormida, hasta que en una de esas ocasiones, siendo las 07:00 horas, el acusado fue pillado por su esposa cuando estaba sentado en el lateral de la cama donde dormía la menor. 

"¿Qué pasa aquí?", le dijo ella. A lo que él reaccionó levantándose rápidamente de la cama y dirigiéndose al armario de la habitación al mismo tiempo que le explicaba a su mujer que simplemente había entrado en el cuarto para coger su ropa. 

Sin embargo, pasadas dos horas, cuando la menor se levantó, lo primero que hizo fue dirigirse a la cocina en busca de su abuela para expresarla que estaba muy triste porque su abuelo había tocado sus partes íntimas. 

Fue entonces cuando la abuela de la menor se dirigió a su marido para recriminarle su comportamiento, aunque él lo negó en todo momento. Por todo ello, todos los que se encontraban en la vivienda regresaron a Madrid, el lugar donde residían, de tal manera que la menor volvió con sus padres sin que estos se llegaran a enterar de absolutamente nada de lo ocurrido hasta pasados entre 15 y 20 días y gracias al tío de la menor. 

Él fue quien se lo contó a los progenitores de la víctima después de que la abuela le confesara los hechos a él, siendo el día 7 de mayo cuando los padres decidieron interponer la correspondiente denuncia ante la Guardia Civil, la cual llevó a la menor a ser explorada ginecológicamente, apreciándole un leve eritema en los genitales, así como el himen perforado centralmente y con un pequeño desagarro. 

Cabe destacar que hasta que se produjeron los hechos, la relación de la menor con el acusado era buena. Tanto, que ella se refería a él como "abuelo" a pesar de que realmente no lo era, mientras que él le hizo un regalo por su cumpleaños cuando ya habían ocurrido los hechos denunciados. Además, hasta ese momento, el agresor también mantenía una relación normal con el resto de la familia. 

El acusado ha sido condenado a seis años de cárcel, pero, además, tendrá que pagar una indemnización de 10.000 euros a la víctima, aunque a través de sus representantes legales mientras esta sea menor de edad, además de los intereses procesales y las costas del juicio, incluidas las de la acusación. 

Del mismo modo, tiene prohibido aproximarse a la menor a menos de 500 metros, a su lugar de residencia, de estudios o cualquier otro lugar donde pueda encontrarse, y también comunicarse con ella por cualquier medio, durante 15 años. 

Tendrá que asumir también una medida de libertad vigilada durante los 10 años posteriores a la finalización de la pena privativa de libertad, a la inhabilitación especial para cualquier profesión, oficio o actividades que impliquen contacto regular y directo con menores, por tiempo superior en cinco años al de la duración de la pena de privación de libertad; y a la inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena. 

Eso sí, el acusado tiene derecho a presentar un recurso de casación en los cinco días siguientes a la notificación de esta sentencia. En caso de hacerlo, el caso será interpuesto ante la Sala Segunda del Tribunal Supremo.