Floja entrada en la última del abono arevalense, donde la nueva empresa ha montado una feria digna de todo elogio. Los dos primeros festejos culminaron con sendas puertas grandes, pero en la novillada, los utreros de lujo -que los Trapote vallisoletanos mandaron desde Sevilla- no encontraron buen final por el mal uso de los aceros.

Ángel Bustos

Abrió plaza un veteranísimo Ángel Bustos (42 años lo contemplan) que, tras su retirada en 2000, ha vuelto a los ruedos no sabemos para qué. Como diría Belmonte a un chaval que también volvía al toreo tras una breve retirada: ¡Y quién te ha llamado para que vuelvas! Ahí lo dejamos.

Tuvo que pechar con tres utreros por la cogida del francés Clemente Jaume y no estuvo a la altura de los buenos novillos que sorteó, a pesar de su buena voluntad. Salvo el primero, que fue exigente y desbordó al veterano diestro, los otros dos fueron manejables y buenos en sus embestidas. El mitin con la espada en los tres que lidió fue memorable. Destacar al subalterno Juan Sierra por una lidia extraordinaria.

Darío Domínguez

El novillero de Íscar volvió también a los ruedos en la tarde de ayer tras abandonar el toreo en 2019 por motivos personales. Luego, la pandemia paralizó sus nuevos planes. Y ayer volvió con aires nuevos, estuvo entregado con sus dos oponentes y gustaron sus formas.

Con su primero, que brindó a su hermana, un novillo de preciosas hechuras, Darío estuvo muy dispuesto y logró excelentes muletazos por el pitón izquierdo. Pero la espada le jugó una mala pasada. Pinchó arriba, señal de que encuentra la yema, pero le faltó empujar como se dice en el argot taurino. Tuvo que descabellar y perdió el trofeo.

Con el que hizo quinto, un novillo más cuajado y encastado, el de Íscar pudo lucirse con la mano derecha en pasajes de mucho gusto y torería. Pero de nuevo con la tizona no pudo rematar otra faena de trofeo.

El 6 de agosto le espera la alternativa en su pueblo natal. Sin duda, Domínguez tendrá que hacer carretón a todas horas para que la espada no le impida un triunfo que él buscará con ahínco en el coso iscariense.  

Destacar la lidia de Jesús Herrero y a los picadores hermanos Agudo (Rafa y Titi).

Clemente Jaume

Tiene buenas maneras el galo que apodera José Ignacio Ramos. Y valor. Hizo lo que tiene que hacer un novillero joven que aspira a ser algo en esto del toro como fue irse a la boca de riego y citar de lejos al deslucido utrero de los Hermanos Trapote, poniendo el ay en los tendidos al pasárselos por detrás. Y luego corrió bien la mano en una faena inteligente. Antes tuvo un buen recibo capotero. Recibió una calurosa ovación.

Brindó al subalterno residente en Arévalo, Alberto Hernández “Botijo” en su despedida de los ruedos. Botijo, además, recibió un emotivo homenaje de sus amigos y familiares tras el paseíllo.

La grave cogida de Jaume

En la suerte suprema, cuando todo parecía que el triunfo estaba asegurado, el novillero de Beziers fue volteado feamente resultando herido. Tras pasaportar al animal, Jaume fue atendido en la misma plaza de numerosas contusiones en la zona dorsal y un traumatismo craneal debido a los numerosos golpes que recibió por parte del novillo, que se lo echó a los lomos a la hora de entrarle a matar. Pasó por su propio pie a la enfermería, donde los facultativos (con la doctora Marta Pérez al frente) decidieron derivarlo al hospital Virgen de Sonsoles de la capital abulense para estudio radiológico.

El parte médico que nos pasó la eficaz Rebeca Hernando, al frente de la comunicación de la empresa, fue el siguiente:

“En el tercero de la tarde, Clemente Jaume, al entrar a matar, ha sufrido un percance en el que el novillo la ha pisado el hemitórax derecho, contusión en el tercio inferior del hemitórax con dolor en el hipocondrio derecho normotenso y taquicárdico.

Traumatismo craneoencefálico con hematoma parietal derecho. Auscultación cardio-pulmonar normal ventilando todos los campos pulmonares.

Se administra suero terapia y analgésica y se traslada al hospital para realización de pruebas de imagen. Firmado Dra. Pérez.

El sábado 8 de julio concurso de cortes

El sábado próximo finaliza la feria taurina de la capital de La Moraña con el Concurso Nacional de Cortes y Quiebros «Ciudad de Arévalo», con la participación de los mejores especialistas del momento.

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