Adif ha comunicado, en la tarde de este miércoles, la intención de continuar con las labores de derribo de la estación de trenes de Mingorría, que arrancaron el martes, con la demolición del edificio anexo de viviendas de los trabajadores ferroviarios y la retirada del amianto de la cubierta del edificio de viajeros.
Todo, tras la polémica con el Ayuntamiento de la localidad abulense, ya que Juan Ignacio Sánchez Trujillano pedía la paralización “urgente” de las obras de demolición de una joya que data del año 1864.
“El derribo de la antigua estación de Mingorría (Ávila) y de sus edificios anexos, en desuso y sin actividad ferroviaria, responde a la necesidad de garantizar la seguridad. Son instalaciones que no están protegidas desde el punto de vista patrimonial, como se confirmó con el Ayuntamiento del municipio mucho antes de plantearse su desmantelamiento”, han apuntado desde Adif.
Añaden que “se dirigieron al Ayuntamiento de Mingorría, en julio de 2022” para “constatar si el edificio estaba incluido en el Catálogo de Bienes de Interés Cultural Municipal” y la respuesta del Ayuntamiento “fue que negativa”.
Chequeado este aspecto, Adif ha procedido a la demolición de unas instalaciones, ubicadas en su propiedad, no requiriendo autorizaciones adicionales. Desarrolla este tipo de actuaciones en edificios en desuso con el máximo respeto a aquellos elementos que, aunque no cuentan con valor patrimonial, forman parte de la historia del ferrocarril y los municipios que los acogen. En este sentido, se mantiene contacto con el Ayuntamiento para donar algún elemento de la estación al municipio. Otros elementos, serán donados a museos o instituciones para seguir preservando la memoria histórica del ferrocarril de nuestro país
Por todo ello, desde Adif han comunicado que “se continuarán con las labores de derribo” que si se llevan a cabo de noche es “por una cuestión de seguridad en la actuación, dada la necesidad de proceder al corte de tensión”.