Nueve años de cárcel y una indemnización de 10.000 euros, además de tener prohibido acercarse a la víctima a menos de 500 metros y a comunicarse con ella durante 14 años. Ese es el precio que le ha costado a un hombre el haber abusado sexualmente de su sobrina de 15 años aprovechando que habían estado consumiendo alcohol y fumando sustancias estupefacientes. Así lo refleja la sentencia de la Audiencia Provincial de Ávila a la que ha tenido acceso este periódico.
En los hechos probados del escrito judicial se señala que el suceso ocurrió en el año 2020, cuando el acusado, expareja de la tía de la menor, fue a buscar a esta a un centro de menores donde permanecía interna por problemas familiares. Allí, recogió a la adolescente y a otros dos amigos de ésta, con quienes estuvo consumiendo cerveza y fumando marihuana.
Cuando los dos amigos se marcharon, el acusado y su sobrina política continuaron en un descampado y a solas consumiendo alcohol y droga, hasta que en un momento dado el hombre se bajó los pantalones y le enseñó sus genitales a la menor. Llegó a besarla y a introducirla los dedos en la vagina, a pesar de que la víctima se negó en varias ocasiones. Ocurrido esto, la llevó de vuelta al centro de menores.
Pasados dos años, la víctima no pudo aguantar más la situación y en una conversación con el acusado le aventuró que iba a contárselo a su madre y a su tía. Finalmente, y a pesar de que sus familiares no la creyeron, la menor de edad decidió denunciar los hechos y ahora la Audiencia Provincial ha condenado al hombre por un delito de abuso sexual a menor de 16 años, según el Código Penal en el momento de los hechos, pero que también está tipificado dentro del delito de agresión sexual a menor de 16 años, el cual se le aplica a pesar de ser posterior por ser más beneficioso para el reo.
La sentencia no es firme y puede ser todavía recurrida ante la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL) en el plazo de 10 días desde que esta fuera notificada a las partes.