La Policía Nacional ha detenido a un hombre por tráfico de drogas después de que fuera él mismo quien avisó a los agentes asegurando que un grupo de personas le estaban esperando para matarle. Este se encontraba alojado en un hotel, desde donde llamó al 091.
Los actuantes se desplazaron al lugar de los hechos y, una vez en la puerta, percibieron un fuerte olor a sustancia estupefaciente. Cuando este salió al pasillo y, al ser preguntado, manifestó que había consumido drogas en la habitación. Del mismo modo, procedió a sacar de su calcetín un trozo de sustancia compacta de color marrón que parecía hachís.
Esta persona se marchó del hotel en un taxi manifestando que se dirigía a otro de la ciudad para hospedarse. Por ello, los agentes dieron por finalizada la intervención. Sin embargo, recibieron una llamada del hotel afirmando que el hombre había vuelto para recoger unas pertenencias y que le había visto coger una bolsa que había escondido en una columna de extinción de incendios, lo que le resultó sospechoso.
Los actuantes se dirigieron al hotel donde se iba a alojar esta persona y lo localizaron en recepción, realizándole un control exhaustivo de sus pertenencias. En ese momento, localizaron una tableta grande de 83 gramos de hachís, dos trozos más pequeños de 3,4 gramos cada uno, una bolsa con gran cantidad de sustancia vegetal picada de color verde que parecía marihuana con dos botes de tabaco con gran cantidad de cogollos de sustancia vegetal de color verdes. Todos ellos sumaban unos 64 gramos y también encontraron un fajo de billetes con 520 euros.
El valor de todo lo incautado podría alcanzar los 1.000 euros en la venta en la calle. Por todo lo anteriormente expuesto, se procedió a su detención por un delito contra la salud pública de tráfico de drogas.