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Quería ser ingeniero aeroespacial, pero hoy es uno de los chefs más reconocidos de la gastronomía española. Y tan solo con 25 años. Carlos Casillas, natural de Ávila, cuenta a pesar de su corta edad con numerosos premios y galardones culinarios. Los más destacados, los que la Guía Michelin le ha dado en este último año.

Fue el pasado año cuando logró la primera estrella Michelin para el restaurante Barro, convirtiéndose en el cocinero más joven de la historia en lograrlo. En la edición de este año no solo la ha revalidado, sino que además ha sido galardonado con el Young Chef Award o Mejor Cocinero Joven 2025.

EL ESPAÑOL - Noticias de Castilla y León charla con este joven abulense apenas 24 horas después de lograr un nuevo éxito para su proyecto personal. "Ha sido un año de arriesgar más con la cocina", reconoce Casillas que al poco de abrir su restaurante en abril de 2023 cambió de local en una vuelta de tuerca.

Su ascenso meteórico culinario le hizo colocarse en el olimpo culinario de nuestro país. Charlar con Carlos es hacerlo, además, con todo su equipo. Y es que aunque sea él la cara visible, nunca se comunica en primera personal del singular y lo hace en plural.

El nuevo reconocimiento como Mejor Cocinero Joven 2025 para la Guía Michelin les hace sentirse "muy felices", ya que es una "ratificación al trabajo que venimos haciendo" y que "demuestra que estamos en el camino correcto".

Tras un "año de cambios", en el que han apostado "más por el proyecto", este premio es un galardón a la "línea que queremos seguir en Barro y que estamos convencidos, que es la creatividad".

Precisamente, el joven chef abulense resalta que la "creatividad genera incomodidad, pero sobre todo para los que estamos en el día a día", pero aclara que "el cambio constante al final te mantiene a alerta".

Para Casillas es "esencial" estar rodeado de las personas que estén "convencidas de que este es el camino", dado que esto es lo que les hace "diferentes y especiales". Además, admite estar en el "mejor momento" a nivel de equipo.

Carlos Casillas en su restaurante Barro. Rmestudios Ical

"Es imposible si no te rodeas de las personas adecuadas. Anoche se veía. Fuimos todos a Murcia a la gala y todos nos decían que daba gusto vernos", celebra un chef que está orgulloso de haber encontrado "a la gente que tiene las mismas convicciones porque Barro es un proyecto diferente".

Si algo ha caracterizado siempre a Carlos Casillas y su proyecto es la defensa del territorio, de lo cercano. En este caso Ávila, su Ávila natural, donde Barro hace las delicias de sus comensales. 

"Lo nuestro es una historia como otras muchas en la que decidimos volver a caso", relata el abulense que apunta que tienen la "convicción de que tiene que ser una mirada hacia futuro y no tanto a lo regresivo".

"Que aporte cosas nuevas y la mejor manera de construir territorio y de asegurar un futuro es precisamente esa", añade.

Para Carlos Casillas, si algo caracteriza especialmente a Barro es la "línea que nos permite hacer lo que queremos, dónde queremos y cómo queremos". "Esa es nuestra identidad, que yo creo que es lo más importante en el mundo de la gastronomía", subraya.

Precisamente, puntualiza que las redes sociales y la sobrexposición en los medios "muchas veces hace que haya cierta estandarización en las propuestas" pero ellos, sin embargo, tratan de "desmarcarse de todo ello".

A sus 25 años, Casillas ha logrado revalidar su estrella Michelin y, además, postularse como la gran promesa culinaria a nivel mundial. Lo hace desde un pequeño rincón de Ávila, donde su apuesta por la creatividad hace a Barro "diferente y especial".