Así será la transformación del antiguo colegio Niño Jesús en viviendas

El alcalde de Burgos, Javier Lacalle, ha visitado este martes el inicio de las obras de rehabilitación del antiguo colegio Niño Jesús, situado entre el paseo de la Audiencia y la plaza Castilla, cuyo coste ascenderá a los seis millones de euros, que transformarán los actuales edificios en viviendas en un plazo de 22 meses.

Lacalle, acompañado de los responsables del proyecto, ha aprovechado la ocasión para agradecer a la congregación religiosa que ocupó durante más de un siglo estos inmuebles su colaboración en todo el proceso para la transformación de las dependencias docentes, así como la inversión de cinco millones de euros en la construcción de un nuevo colegio en la zona de Parralalillos, sobre una parcela de propiedad municipal.

Asimismo, ha puesto en valor este tipo de rehabilitaciones sobre edificios emblemáticos del término municipal, contribuyendo de este modo a su conservación y dotándolos de nuevos usos, en este caso en pleno centro de la ciudad.

El antiguo colegio Niño Jesús se compone de tres edificios, dos de ellos históricos en los que en su día coexistían el propio centro docente y el Bando de España y que se complementaron hace décadas con la construcción de un pabellón en la parte trasera de los mismos.

La actuación que permitirá su reconversión en viviendas prevé la demolición de todos los forjados, manteniendo íntegramente las fachadas, devolviéndolas a su estado original y retirando de ellas todos los elementos, como persianas, incorporados a lo largo de los años.

También será necesaria la demolición de todas las cubiertas, dado el mal estado de la estructura de madera que las soporta, si bien el proyecto contempla su reconstrucción con las mismas características y materiales.

La actuación dará como resultado 25 viviendas, todas ellas diferentes por las características de los inmuebles, de entre uno y cuatro dormitorios, así como 40 plazas de aparcamiento, zonas comunes y trasteros.

Una de las actuaciones más complejas del proyecto pasa por construir dos plantas de sótano sobre el pabellón existente en las traseras de los inmuebles históricos, mientras que una de las más visibles será la construcción de una nueva vivienda, muy similar a las existentes, en la medianera que separaba originalmente ambos edificios.

El diseño del proyecto se ha encargado a BSA Consult, un equipo recientemente galardonado con el Gran Premio Europa Nostra de Conservación, mientras que las obras correrán a cargo de Dragados y la comercialización la gestionarán las inmobiliarias San Pablo y Actívox, ambas de Burgos.