La revista científica ‘Diversity’ publica un artículo acerca de la “extraordinaria” biodiversidad subterránea de Ojo Guareña, ubicado en la Merindad de Sotoscueva, al norte de Burgos. Firmado por la bióloga del Museo Nacional de Ciencias Naturales (CSIC), Ana Isabel Camacho y el arqueólogo Carlos Puch, ambos espeleólogos del Grupo Eespeleológico Edelweiss (GEE), en este trabajo se ofrece la primera lista de taxones subterráneos presentes en Ojo Guareña, y sitúa Ojo Guareña como el mayor punto caliente subterráneo conocido de biodiversidad de España y Portugal.
Ojo Guareña es un importante sistema kárstico que cuenta con importantes aportes de materia orgánica desde la superficie, así como una circulación permanente de agua subterránea. Comprende más de 110 kilómetros de galerías topografiadas hasta la fecha por el Grupo Espeleológico Edelweiss (GEE) y diferentes yacimientos arqueológicos únicos en el mundo. Es el cuarto sistema de cuevas más grande de la Península Ibérica y uno de los 10 más grandes de Europa. Ojo Guareña también ocupa el puesto 23 entre las cuevas más extensas del planeta.
Hasta la fecha, sólo las cuevas volcánicas de las Islas Canarias, en las que existen entre 28 y 38 especies subterráneas, se consideraban ‘puntos calientes’ (‘hotspots’) de biodiversidad subterránea en España.
Además, el trabajo proporciona una lista de 48 taxones adicionales, 34 estilófilos y 14 troglófilos, encontrados en el sistema, cuyo estatus ecológico podría cambiar con estudios biológicos detallados, lo que puede incrementar el número de especies estrictamente subterráneas presentes en el sistema. De hecho, en la actualidad, estas cifras son provisionales, ya que corresponden a una pequeña parte de este importante sistema de cuevas.
Desde el GEE señalan que la biodiversidad de grandes áreas del sistema sigue siendo desconocida, “ya que aún no han sido exploradas desde el punto de vista biológico” Además, recuerdan que un gran número de muestras de fauna terrestre y acuática siguen en fase de estudio por los especialistas correspondientes. Por otro lado, la evidencia de especies crípticas dentro del grupo de crustáceos Bathynellacea da idea de que se puede estar “infravalorando” la biodiversidad real en el sistema kárstico.
A pesar de estas limitaciones, los datos disponibles revelan la importancia de Ojo Guareña como uno de los principales ‘hotspots’ mundiales de biodiversidad subterránea. Estos trabajos han sido posible gracias al apoyo del Museo de Ciencias Naturales de Madrid (CSIC), de la Junta de Castilla y León y de la Diputación de Burgos que patrocina la actividad del Grupo Espeleológico Edelweiss.