N.M.J / ICAL

La villa ducal de Lerma asume por segundo año consecutivo un mes de agosto sin su tradicional Fiesta Barroca, debido a la crisis sanitaria del COVID-19. Esta fiesta, que tiene lugar el primer fin de semana del mes de agosto, recuerda las celebraciones que organizaba el Duque de Lerma en aquella época, y reúne a vecinos y visitantes en un encuentro que rememora la grandeza de las fiestas barrocas.

La Asociación Cultural ‘La Hormiga’, encargada de organizar este evento desde hace veinte años, se ha visto obligada a suspender un año más los actos, por precaución y con el fin de evitar contagios entre las personas que participan en la organización. “Las obras son bastante grandes e involucran a mucha gente. No quisimos arriesgarnos porque hay gente mayor, y por eso cancelamos los ensayos”, explica la presidenta de la Asociación, Eva Blanco.

Para llevar a cabo todos los actos que forman parte de la Fiesta Barroca, son necesarios muchos ensayos, y aunque estos han comenzado a retomarse “poco a poco”, Blanco reconoce que no llegaban a tiempo de preparar un espectáculo “digno de la Fiesta Barroca”.

En este sentido explica que ya están retomando reuniones para empezar organizar los eventos del próximo año, especialmente los ensayos de teatro y danzas, que son los que llevan una mayor dedicación. “Somos mucha gente, así que estamos esperando a ver si este año las vacunaciones se cumplen y podemos quedar de forma más segua”, afirma. En ediciones normales de la Fiesta Barroca, había en torno a unos 200 participantes, un número muy alto de personas, por lo que no quieren “exponer a nadie” hasta saber que es seguro.

Pese a todo, Blanco explica que la villa no se quedará sin su toque Barroco este 2021, y los vecinos y turistas podrán disfrutar de un espectáculo de noche titulado ‘El circo de los sueños’, que incluye malabares, fuego y luz, y que, a pesar de realizarse al margen de esta tradicional Fiesta tiene la esencia del Barroco.

Este espectáculo, que ya pudo verse el pasado 10 de julio en Covarrubias, corre a cargo de la Asociación y de su vicepresidente, Aníbal Díez reconoce que el espectáculo es una “locura” que se le ocurrió un día. La obra está protagonizada por un payaso que un día se da cuenta de que, al contrario que el resto de las personas, no tiene sueños. A partir de ese momento y sirviéndose de la pirotecnia, los correfuegos, los payasos y versos de ‘La vida es sueño’ de Calderón de la Barca, se perfila una historia con la que entretener a niños y mayores.

La obra, que cuenta con una quincena de participantes, se representará en la plaza Santo Domingo de Lerma el próximo 7 de agosto. Blanco asegura que se eligió esa fecha precisamente para que no se confunda con la Fiesta Barroca, que se celebraría el fin de semana anterior, e insiste en que se trata de un espectáculo fuera de la organización de este tradicional evento. El 14 de agosto podrá verse también en Quintanilla del Coco.

Sin embargo, esta no será la única actividad que se desarrolle durante el mes de agosto en la villa ducal. Desde el Ayuntamiento de Lerma han programado una serie de actividades para este mes, entre las que destacan eventos deportivos como el Campeonato de Pádel de Ibereólica o un Circuito provincial de Ajedrez. El ‘Circo de los Sueños’ del Teatro de la Hormiga no será la única representación teatral en agosto, ya que los lermeños podrán disfrutar también de la obra ‘Cabezas de cartel’, organizado por Escenario Patrimonio.

Una festividad a la altura de un Duque

La localidad burgalesa de Lerma celebra desde el año 2000 esta original Fiesta Barroca, que recuerda aquellos encuentros organizados por el valido del rey Felipe III, el Duque de Lerma, con el fin de atraer la atención de los nobles y hacer olvidar al pueblo español las miserias y la decadencia que vivía el país tras las guerras del siglo anterior. Estas se caracterizaban por el color, los ruidos, así como los elementos populares y artísticos, que lograban involucrar a todo el pueblo.

La presidenta de la Asociación Cultural ‘La Hormiga’, Eva Blanco, y el vicepresidente de la misma, Aníbal Díez, lamentan que por segundo año consecutivo no se haya podido llevar a cabo esta fiesta, que aseguran que disfrutaban mucho organizándola, porque permitía a los miembros de la Asociación reunirse y preparar cada uno de los actos que luego los vecinos de la localidad y los turistas disfrutaban.

“Da mucha pena porque es algo que llevamos haciendo durante veinte años. Es muy triste, porque además de poder actuar, te permite tener relación con mucha gente y une mucho a sus participantes”, señala Blanco.

Con el fin de acercar un poco más a la ciudadanía la Fiesta, la Asociación ha montado un museo que expone todos los trajes que aparecen en estas celebraciones, y que recuerda la historia y anécdotas de la época. Actualmente permanece cerrado, sin embargo, están intentando abrirlo a través de la página web de ‘Museos Vivos’, que permite la apertura de pequeños museos del mundo rural a través de la autovisita, permitiendo que puedan ser visitados las 24 horas del día, durante los 365 días del año.