N.M.J / ICAL
Burgos acogerá el próximo 20 de noviembre la presentación oficial del proyecto Amor Conyugal, una iniciativa experiencial que busca afianzar el matrimonio, y propone a la pareja experimentarlo a través de un retiro de dos días, que esperan poder llevar a cabo en la capital burgalesa a principios de 2022, así como continuar con una serie de catequesis de carácter mensual.
Basada en la catequesis de Juan Pablo II, esta iniciativa plantea a la pareja trabajar la relación sobre tres pilares (fe, formación y vida), con el objetivo de recuperar el plan de Dios para el matrimonio y la familia. La iniciativa surgió en Málaga, en 2002 de la mano de sus propulsores, José Luis Gadea y Magüi Gálvez, “quienes recibieron el mensaje en Fátima de trabajar por reconstruir su matrimonio y viviendo esto darlo a conocer a muchos otros matrimonios”.
Con el tiempo esta práctica se ha ido extendiendo por varias diócesis de España, llegando a ciudades como Granada, Talavera, Sevilla, Murcia, Madrid, Segovia, Vitoria, Cordoba Cádiz, Navarra, Barcelona, Bilbao, Zaragoza, Salamanca, Ávila, León o Asturias. El proyecto incluso ha traspasado las fronteras españolas, llegando hasta Argentina, donde también hay matrimonios que han querido sumarse a la experiencia.
“Es un camino de espiritualidad para los matrimonios católicos”, explica Ana de Alberto, una de las encargadas de presentar el proyecto en Burgos. La metodología consiste en reuniones que se inician con una oración, la lectura de un texto, comentado por un matrimonio, y un momento de oración ante el sagrario sobre el mensaje de la catequesis. A continuación, las parejas comparten “un momento de amistad”, hasta el próximo encuentro. “Se mantiene la confidencialidad de cada matrimonio”, añaden desde el Proyecto.
Estas reuniones, que según explica Ana de Alberto, suelen realizarse mensualmente, y esperan poder iniciarlas en el mes de diciembre, una vez el proyecto ya se haya presentado al público burgalés. Además, el proyecto propone también a los matrimonios un retiro de dos días “para que se den nuevamente el sí quiero”. “Nuestra intención es ofrecer en Burgos capital un retiro para la gente de la provincia o el público interesado en hacerlo cerca”. Esperan poder iniciar estas actividades en enero o febrero del 2022.
Ana explica también cómo cambió su matrimonio tras conocer este proyecto en Madrid. “Estábamos acostumbrados a hacer la vida ordinaria y normal, y parecía que estábamos bien, sin embargo hemos vivido momentos únicos donde vemos que nosotros solos no podemos y habíamos dejado apartadas muchas cosas”, explica. Por ello, para ambos esta iniciativa les hizo darse cuenta de que tenían que “volverse a mirar”, y afirma que este retiro de unos días les permite ver su matrimonio “con otra mirada”.
En este sentido asegura que el proyecto ha ayudado incluso a parejas que estaban a punto de separarse o que estaban ya separados, a arreglar sus problemas. La iniciativa está dirigida a personas que han recibido el sacramento del matrimonio, aunque explica que también se ha presentado un programa destinado a matrimonios jóvenes o que vayan a contraer nupcias, con el fin de explicar en qué consiste el matrimonio, y cómo lo pueden vivir.
Bodas y divorcios en Burgos en los últimos años
Uno de los objetivos principales de este proyecto es recordar a la pareja el sacramento del matrimonio. Una práctica con la que buscan en muchas ocasiones ayudar también a aquellas parejas que están pasando un mal momento en sus relaciones, que en un futuro podría derivar en un divorcio o separación.
En este sentido, cabe destacar los datos de divorcios, separaciones y nulidades que se han dado en Burgos entre 2016 y 2019, recogidas por el Instituto Nacional de Estadística (INE). De esta forma, se aprecia un ligero descenso, siendo 2017 el año con mayor número de separaciones, divorcios y nulidades (580), y 2019 el año que menos casos se dieron (470). Por otro lado, los datos provisionales de 2020 muestran que la cifra siguió bajando, con 437 en total, de los cuales 420 fueron divorcios y 17 separaciones, sin ninguna nulidad.
Frente a esto, entre los años 2016 y 2019 las bodas en Burgos mantuvieron cifras similares, que oscilan entre los 1.082 de 2016 y los 1.051 en 2019, con su mayor pico en 2017 con 1.129. Sin embargo, estas cifras se ven muy alteradas en 2020, a consecuencia de la pandemia del COVID-19 y las restricciones en eventos. Los datos provisionales del INE señalan que en la provincia burgalesa se contrajeron 520 matrimonios, 441 de los cuales fueron civiles y 72 católicos.
El vicario judicial de la diócesis de Burgos, Donato Miguel Gómez señala que la tendencia ha bajado, aunque indica que los datos de 2020 e incluso 2021, pese a no conocerse aún, están influenciados por la situación de pandemia.