Imagen de archivo de un policía nacional

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Burgos

Investigan en Miranda de Ebro a una madre y su hijo por intentar estafar a su aseguradora

Su intención era presentar una denuncia falsa para reclamar una compensación por la supuesta sustracción de la cazadora y la reparación del móvil por cerca de 500 euros

11 marzo, 2022 14:53

Agentes de la Comisaría de Policía Nacional de Miranda de Ebro (Burgos) investigaron a una madre y su hijo ya que pretendían presuntamente estafar a su compañía aseguradora, simulando el robo de una chaqueta de 300 euros y la rotura de un teléfono móvil valorado en 163 euros, según informaron hoy fuentes de la Subdelegación del Gobierno a la agencia Ical.

El pasado mes de febrero un joven de 25 años acudió a la Comisaría de Policía Nacional de Miranda de Ebro para denunciar que después de haber estado alternando por la noche en un local de ocio de dicha localidad, dos varones le habían abordado para sustraerle una cazadora, valorada en 300 euros, causándole también daños en su teléfono móvil, y unas supuestas lesiones.

Agentes de la Comisaría de Policía Nacional comenzaron la investigación para poder identificar a los autores del supuesto robo con violencia. Tras realizar las primeras diligencias, comenzaron a detectar incongruencias entre lo manifestado por el denunciante y los hechos que realmente habían ocurrido.

Debido a estas incoherencias los agentes citaron de nuevo a declarar al denunciante, personándose en esta ocasión su madre para reafirmarse en la denuncia que en un primer momento había interpuesto su hijo, aportando nuevos argumentos para intentar dar mayor veracidad a los hechos. Ante las evidencias de que la situación denunciada no se correspondía con la realidad, madre e hijo fueron citados a declarar de nuevo, en esta ocasión como investigados por una presunta simulación de delito.

Ya en Comisaría, madre e hijo confesaron que habían mentido, siendo falso que el denunciante hubiese sido víctima de un robo con violencia. Según manifestaron, su intención era presentar una denuncia falsa para reclamar a su compañía aseguradora una compensación por la supuesta sustracción de la cazadora y la reparación del teléfono móvil que presentaba unos daños no producidos por un hecho delictivo. En total la cantidad económica que pretendían estafar al seguro ascendía a 463 euros.