El Ayuntamiento de Aranda de Duero e i-DE, la compañía distribuidora de Iberdrola, han concretado un marco de colaboración a través de un convenio para el desarrollo e implementación de una fórmula óptima para implantar el modelo de gestión de ciudad inteligente en el municipio.
Esta iniciativa, que permitirá incorporar información de la red de distribución eléctrica de i-DE para implantar el modelo Smart City en la localidad burgalesa, posibilita la adopción de medidas que promuevan un uso más racional de los recursos disponibles, la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, la mejora del medioambiente urbano, la salud de los arandinos, la eficiencia energética, la movilidad eléctrica, así como la concienciación y sensibilización ciudadana en materia de ahorro energético y consumo sostenible.
Dentro de las actuaciones de este modelo energético destaca la implementación del modelo Smart City, que permite la aplicación de desarrollos de innovación tecnológicos sobre las infraestructuras y los suministros, permitiendo mejorar la calidad de vida de los ciudadanos haciendo un uso más inteligente de los recursos.
Asimismo, se potenciará el desarrollo, la innovación y digitalización de las redes eléctricas para seguir mejorando la calidad de suministro y la atención a los habitantes del municipio. Mediante tecnologías de la información, se proporcionarán datos de la red de distribución relacionados con consumo, integración de renovables y penetración de movilidad eléctrica que ayuden en la gestión óptima y contribuyan a la concienciación de los arandinos.
El principal objetivo de este acuerdo es trabajar de manera conjunta en el desarrollo de una movilidad más eficiente, con el despliegue de infraestructura de recarga de vehículos eléctricos en la villa arandina, la instalación de nuevas soluciones energéticas como instalaciones fotovoltaicas en edificios y parcelas municipales, sustitución de luminarias de interior y alumbrado público por otras de mayor rendimiento y tecnología led e instalación de bombas de calor para calefacción, con el fin de construir una ciudad más sostenible.
“Nos encontramos ante un cambio de paradigma en el que las redes inteligentes aportan más y mejor información, permitiendo optimizar los gastos en los servicios municipales y el ahorro y eficiencia energética de las ciudades’, explica Ruperto Espina, jefe del negocio de Red de Iberdrola en Burgos y Soria.
Energía limpia para un planeta sano
i-DE se encuentra inmersa en un proceso de digitalización de la red de distribución eléctrica que va a permitir más información para establecer criterios de eficiencia y sostenibilidad energética, de forma comprometida con una acción climática ambiciosa y urgente.
Mediante la aplicación del modelo de Smart City, se implantarán en la localidad burgalesa los desarrollos tecnológicos, funcionalidades y servicios que resultarán del proceso de digitalización de la red de distribución. El despliegue de la red eléctrica inteligente permitirá incorporar la ‘traza neuronal’ de la red para ofrecer un mejor servicio al ciudadano.
Por su parte, el Ayuntamiento de Aranda de Duero tiene como objetivo avanzar en un modelo energético sostenible y descarbonizado que permita reducir las emisiones un 40% para el 2030 con respecto a los niveles de 1990.
Además de la apuesta de Iberdrola por la descarbonización de la economía y sus cuantiosas inversiones en innovación y tecnologías renovables, su plan de acción climática busca fomentar activamente una cultura que promueva el uso eficiente y responsable de la energía e impulsar la sensibilización climática en el sentido más amplio.