N.M.J. / Ical.- El 17 de abril de 2002, las diputaciones de Burgos, Soria, Guadalajara, Zaragoza, Teruel, Castellón, Valencia y Alicante se unieron para constituir el Consorcio Camino del Cid, una entidad de naturaleza pública llamada a promocionar la ruta que el héroe castellano recorre en el Cantar de mío Cid. Veinte años después esta ruta es “cada vez más visitada” y los objetivos del Consorcio continúan encaminados en dar a conocer esta itinerario, ofreciendo así un “turismo de calidad”.
“Hemos creado una gran ruta al interior del país, que atraviesa ocho provincias españolas de cuatro Comunidades Autónomas distintas”, afirma a Ical el director gerente del Consorcio, Alberto Luque, que pone de manifiesto la importancia de esta “ruta de referencia”, tanto dentro de nuestras fronteras como fuera de ellas. En esta línea indica que a lo largo de estos años han visto el éxito que ha tenido en turistas extranjeros, siendo cada vez más los que se acercan para recorrer el Camino tanto en coche, bicicleta o incluso andando. “Por ejemplo, en los últimos años notamos un incremento muy alto de viajeros holandeses”, añade.
Según apunta Luque, “no existe un patrón semejante en España donde ocho diputaciones se hayan unido para generar un proyecto turístico netamente diferenciado”, como es el caso del Consorcio Camino de Cid, valorando además que esta unión ha logrado mantenerse dos décadas después. “Son Diputaciones muy diferentes unas de otras, y sin embargo han sabido unirse para crear este proyecto vertebrador”, apuntó. Destaca así la importancia de llegar a decisiones unánimes entre todas las diputaciones, así como la implicación de cada una de ellas, apoyando al Camino y su desarrollo.
Debido a su longitud (unos 1.400 kilómetros de senderos y 2.000 de carreteras), el Camino del Cid está dividido en rutas tematizadas de entre 50 y 300 kilómetros aproximadamente unidas entre sí. La ruta implica además a 390 localidades, algunas de las cuales son “muy pequeñas” con un solo habitante, mientras también incorpora otras más grandes, como pueden ser las ciudades de Valencia y Burgos. “El nivel de impacto en el territorio es muy diverso, dependiendo del lugar al que se acuda”, señala Luque.
De esas 390 localidades, el 43 por ciento tiene menos de cien habitantes censados, por lo que la llegada de turistas realizando el Camino suele tener un impacto “muy alto” en ellas. En este sentido, Luque explica que les es muy difícil dar estadísticas del paso de viajeros, debido a las dimensiones del itinerario, sin embargo, señala que las visitas a la web les ayudan mucho, y recuerda que desde hace varios años, la página supera el medio millón de visitantes al año.
Asimismo explica que el número de alojamientos que se han ido creando vinculados a Rodrigo Díaz de Vivar y su historia. “Eso significa que la iniciativa privada ve en el Camino una oportunidad para la generación de recursos turísticos. El mérito de la creación de alojamientos nada tiene que ver con el Consorcio, es de la gente que pone su dinero y día a día, y trabajan en esos alojamientos rurales”, apunta.
Celebraciones por los 20 años
Veinte años es una fecha importante, y por ello el Consorcio lleva todo este 2022 celebrándolo por medio de diversas actividades, como un encuentro de Asociaciones del Camino del Cid, que tuvo lugar en Teruel. Allí se juntaron las asociaciones ganadoras del Premio Álvar Fáñez, en el cual se debatieron las problemáticas del Camino y los aspectos a mejorar de cara al futuro. Tuvo lugar también, por primera vez, el Día del Camino del Cid, una fiesta que tuvo lugar en San Esteban de Gormaz (Soria) en homenaje al Cantar de mío Cid y los pueblos de su ruta, y que esperan que tenga continuidad con el paso del tiempo y se celebre también en otros pueblos del Camino.
Uno de los platos fuertes tendrá lugar a finales de septiembre, concretamente los días 29 y 30, con la celebración del primer Encuentro de alcaldes y alcaldesas del Camino del Cid, que buscará reunir al menos a un centenar de representantes de los pueblos y ciudades que conforman la ruta. La primera jornada se celebrará el día 29 en el monasterio de San Agustín de Burgos, donde, a través de un foro de debate entre los representantes municipales, se abordará la necesidad de proyectos colaborativos interterritoriales como el Camino del Cid, la repercusión de la ruta en el turismo y en la economía de los pueblos y la implicación de las instituciones locales, haciendo un balance de los logros obtenidos en los últimos veinte años.
La segunda jornada se celebrará en el monasterio de San Pedro de Cardeña y está previsto que los alcaldes asistentes firmen una declaración conjunta en la que se incluirán las conclusiones del día anterior. Este acto tendrá una gran fuerza simbólica, pues se celebrará en el mismo lugar donde, hace veinte años, se constituyó el Consorcio Camino del Cid, entidad integrada por las diputaciones de Burgos, Soria, Guadalajara, Zaragoza, Teruel, Castellón, Valencia y Alicante.
Objetivos de mejora
Con respecto a los objetivos que se marca el Consorcio de cara al futuro, Luque afirma que una de sus prioridades es generar un “producto de calidad”, reforzando un Camino del Cid donde “se mira más la calidad de los viajeros que el propio número”.
En esta línea explica que quieren que los alojamientos rurales se adapten también a las nuevas normativas y al nuevo tipo de turismo que se está generando actualmente, “que tiene unas expectativas distintas al turismo rural de hace veinte años”. A esto se une la intención de generar nuevos productos “en consonancia con los nuevos tiempos”, apostando por un turismo sostenible y respetuoso con el medio ambiente, donde se ofrezcan también productos de proximidad, vinculados a la tierra.